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Los equipos de búsqueda están buscando una segunda caja negra del avión de pasajeros de China Eastern Airlines que cayó en picado repentinamente y se estrelló en las colinas boscosas de la provincia de Guangxi, en el sur de China, el lunes.
Las autoridades buscan el crucial dispositivo del avión para descifrar cómo se produjo el desastre aéreo, el peor del país en una década.
Los equipos de búsqueda en el lugar del accidente han encontrado al menos 183 piezas del avión siniestrado, entre ellas partes del motor y elementos de la cabina, según las autoridades. También han encontrado 21 objetos pertenecientes a las víctimas y restos humanos.
También se han localizado carteras, documentos de identidad y tarjetas bancarias pertenecientes a algunos de los pasajeros.
En el tercer día de búsqueda, cientos de voluntarios con botas de goma y ropa de lluvia fueron vistos escudriñando entre los escombros del accidente.
Algunos de los trabajadores fueron vistos tratando de desmantelar un ala de la aeronave que tenía un logotipo rojo y azul de China Eastern estampado en ella.
Más de 300 trabajadores han sido desplegados en la operación de búsqueda, dijo Huang Shangwu, jefe adjunto del departamento de bomberos y rescate de Guangxi.
Según los investigadores, una de las cajas negras, la grabadora de voz de la cabina, fue encontrada con su cubierta exterior masivamente dañada el miércoles.
Si la unidad de memoria interna de la caja negra ha sido dañada, puede llevar más tiempo descifrarla, dijo Zhu Tao, director de la oficina de seguridad de la aviación de la Autoridad de Aviación Civil de China.
La operación de búsqueda no ha sido fluida en todo momento, según las autoridades, ya que las ligeras lluvias caídas en la región montañosa estaban retrasando la búsqueda de pistas para determinar qué causó el descenso del avión casi 90 grados antes de estrellarse.
Los equipos están utilizando bombas para drenar el agua que se acumula en un estanque en el lugar del accidente en medio de una ligera lluvia.
“El bombeo de agua de ayer contribuyó en gran medida al hallazgo de la caja negra”, dijo el señor Huang.
Hasta ahora, los investigadores locales han desplegado herramientas manuales, detectores de metales, drones y perros rastreadores para buscar en la región boscosa de las laderas.
Las cajas negras registran las alertas de audio, todas las conversaciones entre el piloto y el centro de mando, los anuncios de la cabina y los acontecimientos que conducen a cualquier percance concreto.
El avión Boeing 737-800, que transportaba 132 pasajeros, estaba volando a 29.000 pies antes de dejar de responder a las múltiples llamadas de los controladores aéreos chinos y caer en picado.
No se ha informado de ningún superviviente del accidente, y se teme que todos los que iban a bordo del vuelo hayan muerto.
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