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Los manifestantes antigubernamentales en Kenia encendieron hogueras y bloquearon las principales carreteras de la capital el viernes como parte de las protestas a nivel nacional contra los planes del gobierno para aumentar los impuestos. La policía detuvo a más de 20 manifestantes.
Cientos de manifestantes se presentaron en Nairobi, así como en la ciudad costera de Mombasa y la ciudad lacustre de Kisumu, donde la oposición disfruta de un gran apoyo. Algunos negocios cerraron sus puertas. La policía dispersó a los manifestantes con bombas lacrimógenas.
El manifestante Emmanuel Wafula en Nairobi dijo que quería que el presidente William Ruto redujera el costo de vida, no que lo aumentara a través del paquete de impuestos recientemente aprobado por su administración.
“Él quiere gravar el poco dinero que tenemos en nuestros bolsillos. ¿Qué comeremos? Dijo Wafula. “Está aumentando los impuestos a la gente que no tiene nada. Si uno tiene dinero, está bien pagar impuestos. ¡No tenemos nada!”
El comandante de la policía de Nairobi, Adamson Bungei, dijo a The Associated Press que “más de 20 personas” habían sido arrestadas al mediodía, pero no dijo qué cargos enfrentarían.
El paquete fiscal del gobierno aumentó el impuesto al valor agregado sobre el petróleo del 8 % al 16 %, impulsó un impuesto sobre la facturación comercial del 1 % al 3 % y creó un nuevo impuesto a la vivienda del 1,5 % para los trabajadores asalariados.
El líder de la oposición, Raila Odinga, ha pedido a sus seguidores que no paguen los impuestos y la “desobediencia civil” para protestar contra ellos, incluidas más manifestaciones en todo el país previstas para el próximo miércoles.
La implementación de algunas de las nuevas disposiciones fiscales ha sido suspendida por un tribunal en espera de un caso presentado por un senador de la oposición que impugne su legalidad. Sin embargo, el gobierno implementó el aumento del impuesto al combustible.
En un mitin el viernes en Nairobi, Odinga lanzó una campaña de petición para lograr que 10 millones de kenianos firmen una moción de juicio político contra el presidente Ruto. Sin embargo, la constitución de Kenia otorga poderes de juicio político solo a la asamblea nacional, que actualmente controla el partido gobernante.
En marzo, la oposición realizó una serie de protestas semanales que resultaron mortales y causaron daños a propiedades y negocios. Luego, el presidente Ruto invitó a la oposición a un diálogo y la oposición canceló sus protestas. Más tarde acusó al gobierno de deshonestidad durante las conversaciones y prometió reanudar las manifestaciones.
La constitución de Kenia garantiza el derecho a manifestaciones pacíficas, pero la policía a veces niega los permisos a los grupos de oposición debido a un historial de violencia y vandalismo.
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