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Apple ha publicado una gran cantidad de información con el objetivo de argumentar que la gente no quiere usar sus aplicaciones.
La compañía encargó y anunció una investigación que muestra que sus propias aplicaciones no parecen ser especialmente populares, a pesar de que vienen preinstaladas en el teléfono, a diferencia de las ofertas de terceros.
La empresa no sólo ha analizado el número de descargas de las aplicaciones, sino también la frecuencia con la que se utilizan. Y Apple destacó específicamente cómo la investigación mostraba que mucha gente optaba por pasar tiempo en aplicaciones de terceros, incluso cuando Apple ofrece las suyas propias.
La investigación fue realizada por la consultora The Analysis Group. “Nuestro análisis cuantitativo del compromiso con las aplicaciones (no sólo de las descargas de aplicaciones) demuestra que, en muchos tipos de aplicaciones, las aplicaciones propias de Apple son eclipsadas en popularidad y representan una parte relativamente pequeña del uso”, dijeron los autores Juliette Caminade y Markus von Wartburg.
En cuanto a la transmisión de música, por ejemplo, Spotify es 1,6 veces más popular que Apple Music en Estados Unidos, según el informe. Google Maps es 1,5 veces más popular que Apple en el mismo país, y Netflix es 17 veces más popular que Apple TV.
Los mismos patrones se dieron en otros países, señaló Apple. En Japón, por ejemplo, Amazon Prime Video es 407 veces más popular que el Apple TV, dijo.
En muchas de esas categorías, los usuarios individuales suelen estar suscritos a una variedad de plataformas diferentes, señaló Apple.
Aunque Apple no lo mencionó explícitamente, el informe llega en medio de las crecientes críticas a la App Store por parte de los reguladores. Los críticos sostienen que el control de Apple sobre el iPhone le permite favorecer sus propias aplicaciones y establecer normas injustas, y que los legisladores deberían intervenir para igualar las condiciones.
Como respuesta, Apple ha señalado una serie de pruebas -incluido el último informe- en un intento de argumentar que el iPhone y su App Store permiten que florezca una serie de aplicaciones diferentes. Esto le ha llevado en ocasiones a argumentar que sus propias aplicaciones no son especialmente populares.
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