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Los Archivos Nacionales y la Administración de Registros informaron a los legisladores que una serie de comunicaciones electrónicas de los empleados de la Casa Blanca de Trump siguen desaparecidas, casi dos años desde que la administración tuvo que entregarlas.
La agencia de mantenimiento de registros del país, en una carta enviada el viernes al Comité de Supervisión y Reforma de la Cámara de Representantes, dijo que a pesar de un esfuerzo continuo por parte del personal, las comunicaciones electrónicas entre ciertos funcionarios no identificados de la Casa Blanca aún no estaban bajo su custodia.
“Si bien no hay una manera fácil de establecer una responsabilidad absoluta, sabemos que no tenemos la custodia de todo lo que deberíamos”, escribió Debra Steidel Wall, la archivista en funciones, en una carta dirigida a la presidenta de la Comisión de Supervisión, Carolyn Maloney, demócrata de Nueva York.
La carta continuaba especificando que los Archivos Nacionales consultarían con el Departamento de Justicia sobre cómo avanzar y recuperar “los registros ilegalmente retirados.”
Se ha informado ampliamente de que los funcionarios de la Casa Blanca del presidente Donald Trump utilizaron cuentas de mensajería electrónica no oficiales a lo largo de sus cuatro años de mandato. La Ley de Registros Presidenciales, que dice que esos registros son propiedad del gobierno y deben ser preservados, requiere que el personal copie o reenvíe esos mensajes a sus cuentas oficiales de mensajería electrónica.
La agencia dice que, aunque ha podido obtener estos registros de algunos ex funcionarios, varios siguen pendientes. El Departamento de Justicia ya ha perseguido los registros de un exfuncionario de Trump, Peter Navarro, a quien los fiscales acusan de utilizar al menos una cuenta de correo electrónico “no oficial” -una cuenta de ProtonMail- para enviar y recibir correos electrónicos mientras trabajaba como asesor comercial del presidente.
La acción legal en agosto se produjo apenas unas semanas después de que Navarro fuera acusado de cargos penales tras negarse a cooperar con una investigación del Congreso sobre el ataque al Capitolio de Estados Unidos del 6 de enero de 2021.
El comité de la Cámara de Representantes tiene jurisdicción sobre la Ley de Registros Presidenciales, una ley de 1978 que requiere la preservación de los documentos de la Casa Blanca como propiedad del gobierno de Estados Unidos. La solicitud es el último acontecimiento en un ida y vuelta de un mes entre la agencia y el comité, que ha estado investigando el manejo de los registros por parte de Trump.
La carta del viernes también llega casi dos meses después de que el FBI recuperara más de 100 documentos con marcas clasificadas y más de 10.000 otros documentos gubernamentales de la finca de Trump en Mar-a-Lago. Los abogados de Trump habían proporcionado una certificación jurada de que todos los registros del gobierno habían sido devueltos.
Maloney y otros legisladores demócratas en el panel han estado buscando una sesión informativa de los Archivos Nacionales, pero no han recibido una debido a la investigación criminal en curso del Departamento de Justicia sobre el asunto.
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