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El presidente Joe Biden ha declarado el estado de emergencia en Florida ante la posibilidad de que la tormenta tropical Ian se convierta en un huracán de grandes dimensiones en los próximos días.
La declaración de emergencia autoriza al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y a la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA) a coordinar los esfuerzos de ayuda en caso de desastre y a proporcionar asistencia si Ian toca tierra en el Estado del Sol.
El Sr. Biden también ha pospuesto un viaje al sur de Florida que estaba previsto para el martes en previsión del fenómeno meteorológico extremo.
Se esperaba que el presidente diera un discurso sobre Medicare y la Seguridad Social en Fort Lauderdale antes de dirigirse a Orlando para hablar en un mitin del Comité Nacional Demócrata para los candidatos demócratas de Florida.
Habría sido su primera visita al Estado del Sol en más de un año.
La declaración de emergencia federal se produce mientras el gobernador de Florida, Ron DeSantis, también extendió el estado de emergencia a todo el estado el sábado.
El señor DeSantis había emitido el viernes una declaración de emergencia para 24 condados, pero el sábado anunció que la ampliaba y movilizaba a la Guardia Nacional del estado.
El gobernador instó a los residentes a prepararse para la tormenta Ian, que se prevé que golpee el estado con fuertes lluvias y vientos fuertes a mediados de la semana.
“Animamos a todos los floridanos a hacer sus preparativos”, dijo en un comunicado.
Los floridanos han comenzado a hacer acopio de artículos de primera necesidad para prepararse para la tormenta, entre los temores de que ésta pueda provocar cortes masivos de electricidad en las zonas más afectadas.
En un Home Depot de Tampa, los compradores hacían cola para la apertura de la tienda a las 6 de la mañana del sábado, informó Associated Press.
A primera hora de la tarde, la tienda había vendido 600 cajas de agua y se había quedado completamente sin generadores.
Se espera que la Nasa tome una decisión final el domingo sobre el retroceso de su cohete lunar Artemis l en el Edificio de Ensamblaje de Vehículos en el Centro Espacial Kennedy para protegerlo del posible huracán que se avecina.
La agencia espacial se vio obligada a suspender el esperado lanzamiento del cohete, que estaba previsto para el martes, debido a la tormenta.
“La NASA está renunciando a una oportunidad de lanzamiento el martes 27 de septiembre y preparándose para el retroceso, mientras continúa observando el pronóstico del tiempo asociado con la tormenta tropical Ian”, tuiteó la agencia el sábado por la mañana.
El Centro Nacional de Huracanes está pronosticando que Ian se convertirá en un huracán al final del día del domingo, ya que traza una trayectoria a través del Caribe, continuando ganando fuerza en el camino.
A partir de la mañana del domingo, alcanzó velocidades de viento de 50 mph (85 kph), dijo la agencia.
Se espera que la tormenta se mueva sobre las Islas Caimán y el oeste de Cuba antes de alcanzar la costa oeste de Florida y el Panhandle de Florida como un huracán mayor a mediados de la semana.
Para entonces, podría ser un huracán de categoría 3 con vientos de hasta 109 millas por hora (175 kilómetros por hora).
Aunque los meteorólogos dicen que es demasiado pronto para determinar la trayectoria exacta y la fuerza, partes de la costa de Georgia ahora también se encuentran dentro del cono de incertidumbre del huracán.
Mientras Florida se prepara para un posible huracán, Canadá comienza a evaluar los daños y a iniciar los esfuerzos de recuperación tras ser azotada por el ciclón post-tropical Fiona el sábado.
Fiona, que anteriormente era un huracán, tocó tierra a primera hora del sábado en Nueva Escocia antes de subir por la costa este.
A principios de la semana, azotó Puerto Rico, dejando al menos 16 muertos.
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