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El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha acogido con satisfacción las palabras del presidente estadounidense, Joe Biden, en las que acusaba a Rusia de cometer un “genocidio” en Ucrania.
“Creo que, como ha destacado el presidente Biden, hay procesos oficiales en torno a la determinación del genocidio, pero creo que es absolutamente correcto que cada vez más personas hablen y utilicen la palabra genocidio en términos de lo que está haciendo Rusia, lo que ha hecho Vladimir Putin”, dijo Trudeau a los periodistas el miércoles.
“La forma en que están atacando la identidad y la cultura ucranianas, todas estas cosas son crímenes de guerra de los que Putin es responsable. Todo esto son crímenes contra la humanidad”, añadió.
Las declaraciones de Trudeau se produjeron un día después de que el presidente de EE.UU. intensificara su retórica contra Rusia y acusara por primera vez a Moscú de cometer un genocidio en Ucrania.
“Tu presupuesto familiar, tu capacidad para llenar el depósito, nada de esto debería depender de si un dictador declara la guerra y comete un genocidio a medio mundo de distancia”, dijo mientras hablaba en Iowa.
“Sí, lo he llamado genocidio”, añadió. “Cada vez está más claro que Putin sólo intenta acabar con la idea de ser ucraniano”.
Sus palabras fueron mucho más contundentes que las caracterizaciones anteriores de la situación en Ucrania por parte de los funcionarios estadounidenses, que hasta ahora han acusado a Putin y a los militares rusos de cometer “crímenes de guerra”, pero no han reconocido la acusación de genocidio que ha formulado el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelesnky.
El genocidio se considera el máximo crimen de guerra y tiene una definición legal. Sin embargo, rara vez se ha probado en los tribunales desde que se añadió al derecho humanitario tras la Segunda Guerra Mundial.
“Dejaremos que los abogados decidan a nivel internacional si se califica o no, pero a mí me parece que sí”, había dicho Biden.
Mientras la guerra en Ucrania continúa en su octava semana, las fuerzas rusas se han retirado de las áreas alrededor de Kiev en los últimos días tras su fracaso en la captura de la capital.
La mayoría de los expertos y observadores militares han sugerido que Moscú se centra ahora en la toma de áreas en el sur y el sureste de Ucrania, incluyendo centros civiles clave como Mariupol y Kherson, ya que busca el dominio sobre el Mar Negro.
Rusia ha descrito sus acciones en Ucrania como una “operación militar especial” para desnazificar y desmilitarizar el país.
El miércoles, el Kremlin acusó a Estados Unidos de hipocresía y dijo que no estaba de acuerdo con el uso del término genocidio por parte de Biden.
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