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El jueves se captaron raras escenas de protestas públicas en la ciudad de Shanghai, bloqueada, cuando los residentes se enfrentaron a la policía por la decisión del gobierno de convertir sus hogares en instalaciones de cuarentena Covid.
Un vídeo compartido ampliamente en la plataforma de mensajería china WeChat mostraba a los residentes del complejo de Zhanjiang, en el distrito oriental de Pudong, enfrentándose a 30 policías con trajes antipeligrosos, mientras suplicaban a los agentes que les dejaran permanecer en sus apartamentos alquilados.
El enfrentamiento estalló el jueves después de que la policía se trasladara para convertir nueve edificios residenciales del complejo en instalaciones de aislamiento temporal, informó el Financial Times.
El livestream, visto por más de 10.000 personas, fue cortado abruptamente por WeChat al anunciar los censores que el clip contenía “contenido peligroso”.
“No es que no quiera cooperar con el país, pero ¿cómo te sentirías si vivieras en un edificio en el que los bloques estuvieran a sólo 10 metros de distancia, todo el mundo hubiera dado negativo en las pruebas, y se permitiera la entrada a estas personas?”, dijo la mujer que realizaba el vídeo, antes de que éste terminara.
Aunque la veracidad del vídeo no fue verificada de forma independiente, la dirección del complejo residencial confirmó la disputa, informó Reuters.
Las autoridades convirtieron cinco edificios vacíos pertenecientes al Grupo Zhangjiang en instalaciones de cuarentena, según el grupo que también es propietario del complejo. Añadió que otros nueve edificios también se utilizarían para el mismo fin.
El enfrentamiento se produjo porque cuando la “empresa organizó la construcción de la valla de aislamiento, algunos inquilinos obstruyeron la obra”, dijo el grupo en un comunicado, añadiendo que la situación se resolvió.
Un testigo dijo a Reuters bajo condición de anonimato que los trabajadores se presentaron el jueves por la tarde y que la policía les siguió poco después. Este “lugar es completamente inadecuado para convertirse en un centro de cuarentena”, dijo la mujer, mientras expresaba su temor a contagiarse de Covid de los individuos infectados.
Según la política china de cero Covid, todas las personas que den positivo deben ser aisladas en un centro designado, y los vecinos deben permanecer también aislados, lo que aviva el miedo de la población a las consecuencias de contraer el virus.
Shanghái, donde viven unos 26 millones de personas, se ha convertido en el epicentro del mayor brote de Covid en China desde que comenzó la pandemia en el país, registrando más de 300.000 infecciones desde marzo.
Las autoridades se están apresurando a construir camas para albergar a los pacientes de Covid, y la ciudad se ha visto obligada a convertir escuelas, apartamentos recién terminados y salas de exposiciones en instalaciones de aislamiento. La ciudad ha anunciado que ha habilitado otras 160.000 camas en más de 100 hospitales improvisados para intentar hacer frente al aumento diario de las infecciones.
Los casos de covirus en Shanghái descendieron el viernes, pero se mantuvieron en torno a las 23.000 infecciones diarias. Y aunque esta cifra es inferior a los 27.000 nuevos casos del jueves, las cifras del viernes incluían un récord de 3.200 casos sintomáticos, frente a los 2.573 del día anterior.
Información adicional de las agencias
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