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Una gran bomba de la Segunda Guerra Mundial descubierta en un río italiano durante una grave sequía ha sido desactivada de forma segura, según ha informado el ejército.
Los pescadores descubrieron el dispositivo de fabricación estadounidense, que pesaba 450 kg y contenía 240 kg de explosivos, en el seco río Po el 25 de julio.
El descubrimiento se produjo después de que el nivel de agua del río alcanzara un mínimo histórico tras meses de escasas precipitaciones.
“La bomba fue encontrada por los pescadores en la orilla del río Po debido a la disminución del nivel del agua causada por la sequía”, dijo el coronel Marco Nasi.
Alrededor de 3.000 personas que viven en los alrededores tuvieron que evacuar sus casas antes de que se pudiera llevar a cabo la operación de eliminación.
“Al principio, algunos de los habitantes dijeron que no se moverían”, dijo Francesco Aporti, el alcalde de Borgo Virgilio, un pueblo situado cerca de la ciudad norteña de Mantua.
Sin embargo, las autoridades consiguieron convencerles de que abandonaran sus propiedades para poder trasladar la bomba a una cantera cercana para detonarla. Se les permitió regresar a sus casas el domingo por la tarde, después de que los ingenieros hubieran completado la operación.
Antes de destruir la bomba, se cerró un tramo del río y el espacio aéreo de la zona. También se cerraron temporalmente una línea de ferrocarril local y una carretera cercana.
La explosión controlada se produjo en una cantera del municipio de Medole, a 45 km de donde fue encontrada.
El Po, el río más largo del país, sufre la peor sequía de los últimos 70 años, lo que hace temer su efecto en la industria agrícola.
Como consecuencia de la falta de lluvias, Italia ha prohibido las mangueras en algunas regiones y ha impuesto el estado de emergencia en regiones como Lombardía y Piamonte, que durará hasta finales de año.
Las temperaturas en Italia han sido alrededor de tres grados más cálidas que la media estacional de mayo a julio, mientras Europa se enfrenta a temperaturas récord.
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