By 
Carolina del Sur permitirá a los condenados a muerte la opción de una ejecución en pelotón de fusilamiento tras la finalización de las renovaciones de la cámara de la muerte del estado.
El método de ejecución fue codificado en la ley estatal el año pasado para poner fin a una pausa de una década en la ejecución de las sentencias de muerte debido a la incapacidad del estado para conseguir los medicamentos de la inyección letal.
El Departamento Correccional del estado anunció la finalización de las renovaciones de la cámara de la muerte en la capital del estado, Columbia, el viernes. El coste total fue de 53.600 dólares.
El organismo también ha notificado al fiscal general Alan Wilson que ya puede llevar a cabo una ejecución por fusilamiento.
La cámara de la muerte incluye ahora una silla de metal, con sujeciones, en la esquina de la sala en la que se sentarán los reclusos si eligen la ejecución por fusilamiento.
Esa silla está orientada hacia una pared con una abertura rectangular, a 5 metros de distancia, a través de la cual tres tiradores -empleados voluntarios del Departamento de Correcciones- dispararán sus armas.
Cada uno de ellos tendrá un rifle cargado con munición real apuntando al corazón del recluso.
El recluso tendrá una capucha colocada sobre su cabeza y se le dará la oportunidad de hacer una declaración final.
La ley estatal fue modificada en 2021 como forma de sortear la escasez de medicamentos para la inyección letal. En mayo, la silla eléctrica se convirtió en el principal método de ejecución, con las opciones adicionales para el recluso de fusilamiento o inyección letal si estaban disponibles.
El senador estatal demócrata Dick Harpootlian, un fiscal convertido en abogado penalista, presentó la opción del pelotón de fusilamiento, argumentando que es el método de ejecución “menos doloroso” disponible.
Razonando que la pena de muerte sería una ley estatal durante algún tiempo, argumentó que “debería ser humana”.
Un mes después de que se aprobara la legislación, el Tribunal Supremo de Carolina del Sur bloqueó las ejecuciones de dos reclusos por medio de la silla eléctrica, Brad Sigmon y Freddie Owens, hasta que puedan ejercer la opción del pelotón de fusilamiento.
Como las ejecuciones se programaron tan pronto después de la aprobación de la legislación, no se había formado ningún pelotón de fusilamiento y aún no se disponía de medicamentos para la inyección letal, lo que dejaba la silla eléctrica como única opción.
Ahora que se ha formado un pelotón de fusilamiento, el tribunal tendrá que emitir una nueva orden para que se lleve a cabo cualquier ejecución.
Carolina del Sur es uno de los ocho estados que siguen utilizando la silla eléctrica y uno de los cuatro que permiten el uso de un pelotón de fusilamiento, según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte, una organización sin ánimo de lucro con sede en Washington.
La última ejecución del estado tuvo lugar en 2011, y su lote de drogas de inyección letal expiró dos años después. Hay 37 hombres en el corredor de la muerte del estado.
Con información de The Associated Press
Comments