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El célebre asesino en serie Charles Sobhraj, conocido como el “Asesino del Bikini” del sur de Asia, saldrá pronto de la cárcel tras casi dos décadas, por orden del Tribunal Supremo de Nepal.
El asesino en serie, de 78 años, lleva en prisión en Nepal desde 2003 por asesinar a dos turistas norteamericanas en la década de 1970.
El miércoles, el máximo tribunal del país ordenó su puesta en libertad por motivos de salud y edad. La orden judicial afirmaba que “mantenerlo en prisión de forma continuada no se ajusta a los derechos humanos del preso”.
En Kathmandu Post informó de que un tribunal de división compuesto por los jueces Sapana Pradhan Malla y Til Prasad Shrestha pidió al gobierno nepalí que dispusiera también su envío a su país de origen, Francia, en un plazo de 15 días.
El tribunal supremo, en respuesta a las peticiones de puesta en libertad de Sobhraj, decidió el miércoles que debía ser liberado porque ya había cumplido el 95 por ciento de su condena.
“El reglamento de gestión penitenciaria prevé una exención de hasta el 75% de la pena de prisión para los presos mayores de 65 años y con buena conducta”, rezaba el veredicto.
Los abogados de Sobhraj llevaban mucho tiempo pidiendo clemencia. En diferentes peticiones, habían exigido la exención de su pena de cárcel.
Sobhraj fue detenido en Katmandú, capital de Nepal, y posteriormente un tribunal de ese país lo condenó a cadena perpetua por asesinar al turista estadounidense Connie Joe Bronzich en 1975. En 2014 fue declarado culpable del asesinato del mochilero canadiense Laurent Carrière y condenado a una segunda cadena perpetua.
Su condena a cadena perpetua terminaría el 18 de septiembre de 2023.
Sobhraj se ganó el apodo de “Asesino del Bikini” tras cometer, al parecer, dos docenas de asesinatos seguidos de audaces fugas de prisión.
Algunas de sus víctimas llevaban bikini cuando se encontraron sus cuerpos. Según muchos informes, Sobhraj solía seducir a sus víctimas antes de matarlas.
Al parecer, Sobhraj se hacía pasar por traficante de drogas para luego entablar amistad con turistas y asesinarlos.
También fue una obsesión mediática y se hicieron varias películas y documentales sobre él. También inspiró múltiples libros, con una serie de Netflix, La Serpiente, basada también en sus supuestos crímenes.
Al parecer, Sobhraj llevaba un estilo de vida extravagante incluso cuando estaba en prisión. En la cárcel de Tihar, en Delhi, la capital de la India, de donde se fugó audazmente, se le permitían a menudo fiestas de fin de semana y visitas conyugales de sus “admiradores”.
El verdadero nombre de Sobhraj es Hotchand Bhawnani Gurumukh Sobhraj y su padre era indio, mientras que su madre era vietnamita.
Cuando tenía cuatro años, su padre le abandonó y su madre se volvió a casar con un oficial del ejército francés al que, según cuentan sus biografías, Sobhraj le caía mal. En 1963, en París, Sobhraj fue condenado a su primera pena de cárcel por robo.
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