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Un hombre que envió amenazas de muerte al Dr. Anthony Fauci ha sido condenado a tres años de prisión.
El residente de Snowshoe, Virginia Occidental, envió correos electrónicos amenazantes al director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID), en uno de los cuales afirmaba que su familia sería golpeada hasta la muerte e incendiada, según revelaron los fiscales. The New York Times.
En mayo, Thomas Patrick Connally Jr, de 56 años, se declaró culpable de realizar amenazas contra un funcionario federal. La Fiscalía de Estados Unidos en Maryland ha dicho que también reconoció haber enviado amenazas a otros dirigentes de la sanidad pública, como el Dr. Francis Collins, que dirigió los Institutos Nacionales de Salud desde 2009 hasta diciembre del año pasado. El Dr. Collins es el asesor científico en funciones del presidente, mientras que el Dr. Fauci es el principal asesor médico.
La jueza del Tribunal de Distrito de Maryland, Paula Xinis, condenó el jueves a este hombre de 56 años a 37 meses de prisión y tres años de libertad supervisada. En el acuerdo de culpabilidad, Connally admitió haber enviado los correos electrónicos al doctor Fauci entre el 28 de diciembre de 2020 y el 25 de julio del año pasado desde una dirección de correo electrónico anónima y encriptada, según un comunicado de los fiscales federales.
El 21 de julio del año pasado, Connally escribió al Dr. Fauci: “Masacraré a toda tu familia. Pagarás con la sangre de tus hijos tus crímenes”, según los archivos judiciales.
Los documentos de la sentencia del miércoles revelaron que la defensora pública federal Ellie Marranzini dijo que la madre de Connolly había sido aislada en un hogar de ancianos, una situación que había aumentado sus niveles de estrés. Añadió que Connolly estaba “muy preocupado” por los efectos del aislamiento social en quienes viven en residencias de ancianos.
Las amenazas dirigidas al Dr. Fauci se produjeron en medio de un torrente de improperios contra los funcionarios de la sanidad pública cuando éstos impulsaron el uso de mascarillas y el distanciamiento social mientras la pandemia hacía estragos.
El Dr. Fauci, de 81 años, se convirtió en un héroe para algunos, pero fue fuertemente repudiado por muchos otros, y los partidarios de Trump a veces coreaban “despidan a Fauci”. El ex presidente Donald Trump habló a veces en voz alta de la posibilidad de destituirlo de su cargo, que ocupa desde 1984. Se le acusó falsamente de crear el virus y lucrarse con las vacunas, según The Times.
El fiscal de los Estados Unidos de Maryland, Erek Barron, dijo en un declaración el jueves que aunque “todo el mundo tiene derecho a estar en desacuerdo… no se tiene derecho a amenazar la vida de un funcionario federal”.
Los fiscales federales también dijeron que Connolly envió mensajes amenazantes a la doctora Rachel Levine, la subsecretaria de Sanidad.
Connolly envió cuatro correos electrónicos al Dr. Collins a partir de las 21.34 horas del 24 de abril de 2021, que incluían amenazas personales y familiares, como la agresión y la muerte si “no dejaba de hablar sobre la necesidad de las vacunas ‘obligatorias’ de Covid-19”, según los fiscales.
“Connally admitió que envió las amenazas a los doctores Fauci y Collins con la intención de intimidar o interferir en el desempeño de sus funciones oficiales”, señalan en un comunicado, y añaden que fue “con la intención de tomar represalias contra el doctor Fauci y el doctor Collins por el desempeño de sus funciones oficiales, entre ellas hablar del Covid-19 y de sus pruebas y prevención”.
Fue detenido en Snowshoe en julio del año pasado. Al registrar su casa, las autoridades encontraron cinco ordenadores portátiles y dos teléfonos móviles.
Un memorando de sentencia del lunes afirmaba que los correos electrónicos de Connolly constituían una “campaña de terror”.
“Inteligente y tecnológicamente sofisticado, el acusado tenía la intención de aumentar el terror que pretendía infundir utilizando un proveedor de correo electrónico encriptado extranjero”, escribieron los fiscales en la nota. “El uso de este proveedor también permitió al acusado ocultar su identidad y continuar enviando sus correos electrónicos amenazantes sin interrupción”.
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