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Desde Bradley Cooper hasta Steven Spielberg, algunas de las estrellas más brillantes de Hollywood se reunieron para relajarse y tomar vino en un elegante salón de baile donde todos acabaron saliendo ganadores en los Premios del Instituto de Cine Americano el viernes.
El almuerzo anual del AFI, al que sólo se puede acceder por invitación, premió a 10 películas y 10 programas de televisión con unas palabras bien pronunciadas sobre el proyecto celebrado, seguidas de un breve clip de una escena. “Squid Game”, “Belfast” y “Summer of Soul (…or: The Revolution Will Not Be Televised’)” recibieron premios especiales durante el evento.
Antes del evento se compartieron risas y abrazos entre la estrella de “tick, tick… ¡Boom!” Andrew Garfield y Lee Jung-jae y Jung Ho-yeon de “Squid Game”. Cooper y el actor de “Pizza de regaliz” Cooper Hoffman charlaron antes de que ambos posaran para las fotos. La estrella de “WandaVision”, Kathryn Hahn, se desvivió por conocer al reparto de “Squid Game” en su mesa en un salón de baile en Beverly Hills, California.
La estrella de “West Side Story”, Ariana DeBose, mantuvo una jovial conversación con Spielberg en la alfombra roja. Garfield estuvo firmando con la estrella de “CODA” Marlee Matlin después del evento.
El evento del AFI se centra en la diversión, creando un ambiente relajado y sin presión.
“Si has estado con nosotros antes, conoces el juego. El juego es: No hay juego”, dijo el presidente del AFI, Bob Gazzale, mientras muchos de los asistentes se reían. “Habéis ganado. Lo más importante es que hoy habéis ganado todos”.
Entre las películas reconocidas se encuentran “CODA”, “No mires hacia arriba”, “Dune”, “El rey Ricardo”, “Pizza de regaliz”, “El callejón de las pesadillas”, “El poder del perro”, “Tic, tac… ¡Boom!” “La tragedia de MacBeth” y “West Side Story”.
Los programas de televisión homenajeados fueron “Hacks”, “Maid”, “Mare of Easttown”, “Reservation Dogs”, “Schmigadoon!” “Succession”, “Ted Lasso”, “The Underground Railroad”, “WandaVision” y “The White Lotus”.
Entre los asistentes a la sala repleta de estrellas también estaban Meryl Streep, Ahmir “Questlove” Thompson, Guillermo del Toro, Keegan-Michael Key y Rita Moreno.
Morgan Freeman cerró el almuerzo con una bendición para celebrar a los homenajeados, entre los que se encontraba el difunto actor Sidney Poitier, fallecido a la edad de 94 años a principios de este año.
“Alguien tenía que derribar la puerta”, dijo Freeman sobre Poitier, el innovador actor que transformó la forma de representar a los negros en la pantalla. “En el béisbol, fue Jackie Robinson. En política, Barack Obama. Para nosotros, fue Sidney Poitier. Sin Sidney, no hay Halle Berry. Sin Sidney, no hay Viola Davis. Sin Sidney, no hay Denzel. Diablos, sin Sidney, no soy yo”.
Freeman dijo que Poitier era “mi brújula que me mostraba el camino, mi única luz brillante que iluminaba el sendero por el que debía caminar.”
“Aunque Sidney ya no esté con nosotros, su luz nunca se apagará”, continuó. “No importa de dónde seas o quién seas, él fue, es y siempre será una inspiración”.
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