Han aparecido imágenes y vídeos que muestran los momentos previos y posteriores a que un avión de combate de la Armada estadounidense se estrellara en el Mar de China Meridional cuando intentaba aterrizar en un portaaviones.
En el vídeo, que ha circulado ampliamente en las redes sociales, el avión -un caza furtivo F-35C- se acerca a la cubierta de aterrizaje de un portaaviones, el USS Carl Vinson, durante una operación rutinaria. En la grabación se ve cómo el avión se acerca para aterrizar y luego desaparece de la vista con un estruendo, pero el clip se corta antes de que se pueda ver el choque en sí.
También circulan imágenes fijas que muestran el avión en el agua, parcialmente sumergido y sin el asiento eyector.
Según la Marina, el caza chocó contra la cubierta de vuelo del Vinson, momento en el que el piloto se eyectó antes de caer al agua. Junto con el piloto, seis marineros a bordo del buque resultaron heridos.
Los restos del avión avanzado aún no han sido recuperados del fondo del océano, una situación arriesgada dado que el accidente tuvo lugar en el Mar de China Meridional, una enorme masa de agua reclamada casi en su totalidad por el gobierno chino bajo una premisa no aceptada por la mayor parte del resto del mundo.
Durante la última década y más, el ejército chino ha aumentado constantemente su presencia en la región, construyendo nuevas bases en tierra artificial y acosando intermitentemente a los barcos civiles pertenecientes a los países vecinos.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino dijo tras el accidente que no tienen “ningún interés” en el avión estadounidense, y aconsejó que los militares estadounidenses “contribuyan más a la paz y la estabilidad regionales, en lugar de flexionar la fuerza a cada paso.”
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