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El gerente de la casa de Johnny Depp, Ben King, dijo que escuchó “sollozos histéricos, llantos” al entrar en la casa donde el señor Depp y Amber Heard se alojaban en Australia el domingo 8 de marzo de 2015.
Dijo que “me sonaba a la señora Heard”. El Sr. King dijo que la Sra. Heard estaba “histérica” y que estaba “llorando mucho… incontroladamente”.
El juicio por difamación entre el Sr. Depp y la Sra. Heard comenzó el lunes 11 de abril en Fairfax, Virginia, tras la demanda del Sr. Depp contra su ex esposa en marzo de 2019. El Sr. Depp argumenta que ella lo difamó en un artículo de opinión de diciembre de 2018 publicado en The Washington Post titulado “Hablé contra la violencia sexual – y me enfrenté a la ira de nuestra cultura. Eso tiene que cambiar”.
El Sr. King dijo que el médico del Sr. Depp, David Kipper, estaba “rebuscando en una papelera” en la cocina.
“Dijo que el señor Depp había sufrido una lesión en el dedo y que estaba buscando la punta del dedo que, según él, se había cortado”, añadió el señor King.
El gerente de la casa dijo que dejó al Dr. Kipper en la cocina y bajó “para buscar”.
El Sr. King testificó que fue él quien encontró la punta del dedo en la “zona del bar” de la casa, y añadió que, al bajar las escaleras, se dio cuenta de que “habían arrancado un gran trozo de la escalera de mármol”.
Añadió que abajo encontró cristales rotos, una mesa de ping pong “derrumbada” y muchas latas rodeando la zona del bar”.
El Sr. King dijo que encontró la punta del dedo “directamente debajo de la barra” y que otro “gran trozo” se había desprendido de la parte superior de mármol del bar.
Observó “papel de cocina” con “mucha sangre alrededor” en el suelo entre el que encontró la yema del dedo. Añadió que observó “charcos de lo que olía a alcohol” alrededor de la yema del dedo, así como vasos y botellas rotas.
El Sr. King dijo que las paredes de la zona habían sido dañadas, así como las ventanas y un espejo detrás de la barra. Declaró que una botella de vodka que encontró estaba rota, y añadió que “nada estaba realmente intacto”.
El Sr. King dijo que recogió la yema del dedo en el papel y la puso en una bolsa de plástico encima de un poco de hielo y se la entregó al Dr. Kipper y al jefe de seguridad Jerry Judge “que estaban deseando llevarla al hospital rápidamente para ver si se podía volver a colocar”.
Añadió que encontró la punta del dedo alrededor de una hora después de llegar, sobre las 15.30 horas, y que había “goteos de sangre” por el suelo.
Hablando de los grandes daños en el resto de la casa, dijo que “los restos de una taza de café estaban incrustados” en un televisor montado en la pared.
En su artículo de opinión de 2018, la Sra. Heard escribió que “como muchas mujeres, había sido acosada y agredida sexualmente cuando estaba en edad universitaria. Pero me quedé callada: no esperaba que al presentar las denuncias se hiciera justicia. Y no me veía como una víctima”.
“Luego, hace dos años, me convertí en una figura pública que representaba el abuso doméstico, y sentí toda la fuerza de la ira de nuestra cultura para las mujeres que hablan”, agregó en ese momento.
Aunque el Sr. Depp no es nombrado en el artículo, su equipo legal argumenta que contiene una “clara implicación de que el Sr. Depp es un maltratador doméstico”, lo que dicen es “categóricamente y demostrablemente falso”. El Sr. Depp solicita una indemnización por daños y perjuicios de “no menos de 50 millones de dólares”.
La Sra. Heard ha presentado una contrademanda de 100 millones de dólares contra el Sr. Depp por molestias e inmunidad ante sus acusaciones.
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