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Después de que Twitter cerrara un acuerdo con Elon Musk para vender la compañía de medios sociales al multimillonario de la tecnología por aproximadamente 44.000 millones de dólares, se ha producido una oleada de especulaciones sobre cómo el nuevo propietario tiene la intención de moderar una plataforma que ha prometido llevar a cabo de forma privada al tiempo que prioriza la “libertad de expresión”.
Una persona que teme cómo será un Twitter gobernado por Musk es Jack Sweeney, el codificador adolescente detrás del bot de Twitter @ElonJet, una cuenta que sigue los movimientos de las escapadas en jet privado del titán de Tesla.
Hablando con Insider tras el anuncio del lunes de la venta de la plataforma con sede en San Francisco al Sr. Musk, el nativo de Florida y estudiante universitario de primer año dijo al medio que no estaba seguro de que el fundador de SpaceX le permitiera mantener la cuenta del bot con vida.
“Es difícil pensar que no haría algo”, dijo el Sr. Sweeney a Insider.
Es probable que las preocupaciones del Sr. Sweeney estén justificadas, sobre todo a la luz de lo ocurrido el pasado otoño entre el adolescente y el nuevo propietario de Twitter.
En noviembre de 2021, el Sr. Musk supuestamente se puso en contacto con el Sr. Sweeney y le ofreció al codificador 5.000 dólares para cerrar la cuenta de seguimiento del jet, argumentando que había problemas de seguridad con la información que se comparte públicamente.
El Sr. Sweeney, sin embargo, rechazó la oferta y, en su lugar, contraatacó con 50.000 dólares, además de unas prácticas o un Tesla Model 3, según informa The New York Times.
Ahora que el fundador de Tesla pronto estará al frente de una de las plataformas de medios sociales más influyentes, una compra que aseguró ofreciendo el pago de 54,20 dólares en efectivo por acción, el Sr. Sweeney dijo Insider que podría intentar exprimir un poco más que su anterior contraoferta, sobre todo porque la cartera del señor Musk, que ya es la persona más rica del mundo, probablemente va a aumentar tras esta reciente transacción.
“Definitivamente tendría que ser un acuerdo bastante bueno ahora, porque ha pasado mucho tiempo”, dijo el Sr. Sweeney a Insider. “Definitivamente un Tesla, totalmente pagado y todo”.
Fuera de los intentos del propio señor Musk por silenciar el bot, el señor Sweeney no ha estado exento de críticas por airear los viajes de los ricos y famosos.
“Hay algunos en Twitter a los que no les gusta lo que hago”, dijo. “Recibo mensajes directos groseros, pero los realmente malos los denuncio y las cuentas acaban siendo retiradas”.
Aunque el creador de la cuenta de 410.000 seguidores aún no ha recibido ninguna garantía directa de que su bot de seguimiento de aviones no será retirado, el Sr. Musk, un autoproclamado entusiasta de la libertad de expresión, dijo en un comunicado el lunes antes del acuerdo alcanzado que le gustaría que sus “peores críticos” permanecieran en la plataforma de medios sociales.
“Espero que incluso mis peores críticos permanezcan en Twitter, porque eso es lo que significa la libertad de expresión”, escribió.
Más tarde, después de que se anunciara la venta, Musk fue más allá y dijo en un comunicado de la empresa: “La libertad de expresión es la base de una democracia que funciona, y Twitter es la plaza digital donde se debaten asuntos vitales para el futuro de la humanidad.”
También añadió que quería hacer la plataforma de medios sociales “mejor”, lo que incluiría la adición de nuevas características, el aumento de la transparencia en los algoritmos de la aplicación y la eliminación de los bots de spam.
“Twitter tiene un enorme potencial: estoy deseando trabajar con la empresa y la comunidad de usuarios para desbloquearlo”.
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