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Un candidato poco conocido para la carrera al Senado de Estados Unidos en Alaska suspendió su campaña el lunes, con la esperanza de no dividir el voto del Partido Republicano durante las elecciones generales, lanzando su apoyo a un compañero republicano respaldado por el ex presidente Donald Trump.
Buzz Kelley, que terminó cuarto en las primarias, dijo que su motivación para suspender la campaña surgió después de que los republicanos Sarah Palin y Nick Begich perdieran frente a la demócrata Mary Peltola en las elecciones generales especiales para el escaño de la Cámara de Representantes del estado que quedó vacante con la muerte en marzo del representante federal Don Young.
“Después de la victoria de Peltola, el divide y vencerás de Sarah y Nick, no quiero ser parte de eso para la carrera al Senado”, dijo Kelley a The Associated Press en una entrevista telefónica. Anteriormente había anunciado su decisión al llamar a un programa de radio de Anchorage.
“Siento que Kelly Tshibaka es la mejor opción, y por eso (estoy) preguntando a todos los que me apoyaron a mí o a mis ideas si ahora pueden lanzar su apoyo a Kelly Tshibaka”, dijo.
Otros candidatos son la actual senadora Lisa Murkowski, también republicana, y el demócrata Pat Chesbro.
Los votantes de Alaska aprobaron en 2020 un nuevo sistema de votación en el que las primarias de los partidos han sido sustituidas por unas primarias abiertas. Los cuatro más votados, independientemente de su afiliación partidista, pasan a las elecciones generales, en las que se utiliza la votación por orden de preferencia.
En la votación por orden de preferencia, las papeletas se cuentan por rondas. Un candidato puede ganar directamente con más del 50% de los votos en la primera ronda. Si nadie alcanza ese umbral, el candidato con menos votos queda eliminado. Los votantes que eligieron a ese candidato como su principal opción cuentan sus votos para su siguiente elección. Las rondas continúan hasta que quedan dos candidatos, y gana quien tenga más votos.
Murkowski recibió el 45% de los votos en las primarias, seguida por Tshibaka con el 39% y Chesbro con el 7%.
Kelley quedó en cuarto lugar con el 2% de los votos.
El momento de la suspensión de su campaña fue a propósito, dijo. Si hubiera abandonado la campaña antes de la fecha límite del 5 de septiembre, el quinto candidato lo habría sustituido en la papeleta de las elecciones generales.
“No quería enturbiar las aguas, así que ahora sólo hay tres candidatos en la carrera”, dijo.
Tshibaka agradeció el apoyo de Kelley.
“Me siento agradecido y honrado de tener el apoyo de Buzz Kelley y estoy de acuerdo con su conclusión de que presentar un frente unificado nos da la mejor oportunidad de vencer a Lisa Murkowski”, dijo Tshibaka en un comunicado.
La campaña de Murkowski declinó hacer comentarios.
Kelley, un mecánico jubilado de 65 años de Wasilla, había dicho anteriormente al Anchorage Daily News que parte de su éxito en terminar cuarto y hacer la boleta electoral general podría ser por los pocos carteles de jardín que tenía, incluyendo uno que soldó a la parte superior de su vehículo.
Cuando Trump celebró un mitin en Anchorage para Tshibaka y Palin, Kelley se pasó el día conduciendo su vehículo alrededor de la gran multitud que esperaba para entrar en el estadio de Anchorage.
Dijo que parece “un poco exagerado” que la gente que miraba la papeleta lo confundiera con Tshibaka, cuyo eslogan es “Kelly para Alaska”.
“Probablemente existe la posibilidad de que algunas de esas personas hayan tenido la intención de votar por Kelly Tshibaka”, dijo al periódico. “Pero también es posible que la gente haya mirado mi página web y diga: ‘Oye, me gustan algunas de esas cosas. Creo que voy a colorear el óvalo de Buzz’. “
Murkowski, en el cargo desde 2002, es un objetivo frecuente del ex presidente después de haber votado a favor de su destitución y haber hablado críticamente de él.
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