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El padre de un niño de tres años que falleció el martes en China dijo que las estrictas políticas de Covid del país “mataron indirectamente” a su hijo.
Tuo Shilei dijo que su hijo, Wenxuan, se retrasó en recibir tratamiento debido al estricto bloqueo en la ciudad de Lanzhou.
El niño de tres años falleció el martes por intoxicación de monóxido de carbono en el noroeste de China. Su muerte ha desencadenado un tsunami de indignación y rabia en las plataformas de las redes sociales chinas.
El padre denunció que la policía local no respondió inmediatamente a su llamada de emergencia. Sin embargo, la policía ha rechazado sus acusaciones y ha dicho que respondió inmediatamente a la llamada.
El Sr. Tuo dijo que no pudo sacar a su hijo del complejo residencial durante más de una hora. Lanzhou, la capital de la provincia de Gansu en la que vive el padre, lleva varios meses encerrada.
“Personalmente creo que fue asesinado indirectamente”, dijo el Sr. Tuo a Reuters.
Su mujer ya se había encontrado mal tras un presunto escape de gas en su apartamento el martes. Se resbaló y cayó al suelo tras inhalar los gases tóxicos.
La esposa, que no pudo ser identificada inmediatamente, mostró más tarde una mejoría.
El Sr. Tuo se dio cuenta del empeoramiento del estado de su hijo y, al mediodía del martes, intentó desesperadamente llamar a la policía o a una ambulancia.
Tras una media hora de búsqueda frenética de ayuda, empezó a practicarle a su hijo de tres años la reanimación cardiopulmonar, que le ayudó en cierta medida.
A continuación, corrió con su hijo hasta la entrada de su complejo residencial, donde fue detenido por los guardias de seguridad porque la ciudad estaba bajo estricto bloqueo. El personal de las puertas no le dejó pasar a la entrada y le dijo que llamara a una ambulancia.
Atravesó la puerta y tomó un taxi para ir a un hospital local, donde los médicos declararon muerto a su hijo de tres años.
“La causa de la muerte de mi hijo fue un accidente, pero durante todo el proceso de nuestra llamada de auxilio hubo evasión de responsabilidades y dejación de funciones. El control de la pandemia fue demasiado lejos”, dijo el desconsolado padre, citado por la BBC
A última hora del martes, cuando surgió la noticia de la muerte del niño de tres años en Internet, se produjeron airadas protestas.
“Los tres años de la pandemia fueron toda su vida”, se escuchó decir a un manifestante.
Pronto, la trágica historia del niño de tres años se hizo viral también en las redes sociales chinas. En Weibo, “tres años de Covid fue toda su vida” empezó a ser tendencia.
“El recuerdo del niño será tristemente de máscaras y nada más”, escribió un usuario.
“Aunque la policía reaccionó con rapidez, ¿no debería investigarse a fondo si alguna parte impidió que el padre recibiera ayuda?”, cuestionó otro usuario en Weibo.
El miércoles por la mañana se celebró un funeral por el niño de tres años en la cercana ciudad natal de la familia, Hezheng.
El padre no asistió por miedo a ser puesto en cuarentena a su llegada.
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