Un demócrata de Oklahoma que se presenta como candidato al Congreso ha pedido disculpas tras haber soltado una supuesta diatriba con insultos a un grupo de adolescentes.
Abby Broyles, de 32 años, trabajó como periodista y abogada en Oklahoma City antes de presentar su candidatura al Congreso, pero un incidente del día de San Valentín en una fiesta de pijamas, de todos los lugares, la ha metido en un lío.
Varios padres se quejaron del comportamiento de la Sra. Broyles en la fiesta, que celebraban la hija y las amigas de su amiga de la facultad de Derecho. Según los padres de las chicas, la candidata no sólo utilizó un lenguaje profano al dirigirse a ellas, sino que también lanzó ataques personales sobre todo, desde la etnia hasta el acné.
El antiguo empleador de la Sra. Broyles, La cadena de televisión KFOR, informó que la amiga “desprecia que esto haya ocurrido en su casa y que nunca había visto a Broyles así en el pasado”.
En una entrevista con la emisora, realizada por su ex colega, la Sra. Broyles negó tener un problema de abuso de sustancias e insistió en que no recordaba nada de la noche después de mezclar vino con un medicamento que nunca había tomado. La droga estaba destinada a ayudarla con el estrés, la ansiedad y el insomnio, dijo a KFOR.
“Tuve una reacción adversa; en lugar de ayudarme a dormir, aluciné”, dijo. “Y no recuerdo nada hasta que me desperté o volví en sí, y estaba vomitando en un cesto.
“Recuerdo que empecé a alucinar, y el resto es borroso. Sólo recuerdo que abrí los ojos, y que me había puesto enferma… y que no sabía dónde estaba. Fue la experiencia más horrible que he tenido”.
La historia fue publicada por primera vez por el sitio web NonDoc.com. La Sra. Broyles negó inicialmente haber asistido a la fiesta, pero más tarde afirmó a KFOR que había sido mal citada, a pesar de que la emisora había escuchado la conversación grabada.
“En primer lugar, quiero volver a pedir disculpas a las familias, y a la gente que dice que me he desmayado y que me lo estoy inventando, no me conocen. Nunca, jamás, diría algo hiriente como esas cosas, y por eso sé que no estaba en mi sano juicio”, dijo a KFOR.
“Sé que eso es lo que pasó por esa combinación de cosas, y lo lamento profunda, profundamente”.
Ella continuó: “Quiero decir que lo siento desde el fondo de mi corazón. Me disculpo por cualquier daño o trauma que mi comportamiento, cuando no sabía lo que estaba haciendo, causó. No recuerdo en absoluto este episodio.
Cuando se le presionó sobre cómo el incidente pudo haber perjudicado su candidatura al Congreso, dijo: “Lamento profundamente lo ocurrido por la gente a la que afectó.
“Estaré bien, pase lo que pase, pero en cuanto a esta campaña, nunca voy a dejar de luchar por Oklahoma, ya sea en esta carrera o luchando por la causa de alguna otra manera”.
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