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El máximo tribunal británico denegó el lunes al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, el permiso para apelar la decisión de extraditarlo a Estados Unidos para que se enfrente a cargos de espionaje.
El tribunal dijo que lo rechazó porque el caso “no planteaba un punto de derecho discutible”.
Assange ha tratado durante años de evitar un juicio en Estados Unidos por una serie de cargos relacionados con la publicación por parte de WikiLeaks de un enorme trozo de documentos clasificados hace más de una década.
Un juez de distrito británico había rechazado inicialmente una solicitud de extradición de Estados Unidos con el argumento de que Assange probablemente se suicidaría si se le mantenía en las duras condiciones de la prisión estadounidense. Más tarde, las autoridades estadounidenses aseguraron que el fundador de WikiLeaks no se enfrentaría al tratamiento severo que, según sus abogados, pondría en riesgo su salud física y mental.
En diciembre, el Tribunal Superior anuló la decisión del tribunal inferior, diciendo que las promesas de Estados Unidos eran suficientes para garantizar que Assange sería tratado con humanidad.
La noticia del lunes reduce las opciones de Assange, pero su equipo de defensa todavía puede tratar de llevar su caso al Tribunal Europeo de Derechos Humanos o impugnar las otras conclusiones del juez original.
Barry Pollack, el abogado de Assange con sede en Estados Unidos, dijo el lunes que era “extremadamente decepcionante” que el Tribunal Supremo de Gran Bretaña no esté dispuesto a escuchar la apelación.
“El Sr. Assange continuará el proceso legal luchando contra su extradición a los Estados Unidos para enfrentar cargos criminales por publicar información veraz y de interés periodístico”, dijo.
Los fiscales estadounidenses dicen que Assange ayudó ilegalmente a la analista de inteligencia del Ejército de Estados Unidos Chelsea Manning a robar cables diplomáticos clasificados y archivos militares que WikiLeaks publicó posteriormente, poniendo vidas en peligro.
Pero los partidarios y abogados de Assange argumentan que estaba actuando como periodista y tiene derecho a las protecciones de la Primera Enmienda de la libertad de expresión para la publicación de documentos que expusieron las irregularidades militares de Estados Unidos en Irak y Afganistán.
Assange, de 50 años, está recluido en la prisión de alta seguridad de Belmarsh, en Londres, desde 2019, cuando fue detenido por saltarse la fianza durante una batalla legal distinta. Antes de eso, pasó siete años dentro de la Embajada de Ecuador en Londres para evitar la extradición a Suecia para enfrentar acusaciones de violación y agresión sexual.
Suecia abandonó las investigaciones por delitos sexuales en noviembre de 2019 porque había transcurrido mucho tiempo.
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Eric Tucker contribuyó a este informe desde Washington.
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