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El atentado perpetrado durante el rezo vespertino del miércoles en una mezquita de la capital afgana, Kabul, ha dejado 21 muertos y 33 heridos, según la última actualización facilitada por un portavoz policial talibán.
La mortal explosión se produjo cuando decenas de personas rezaban en la mezquita de Siddiquiya, en el barrio de Kher Khanna, al norte de la ciudad, pero no se anunció inmediatamente ninguna cifra de muertos.
El jueves, Khalid Zadran, portavoz del jefe de la policía talibán de Kabul, confirmó la muerte de 21 personas en el atentado y la existencia de 33 heridos.
El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, condenó la explosión y prometió que los “autores de tales crímenes serán llevados pronto ante la justicia y serán castigados”.
Entre los heridos también hay varios niños, entre ellos uno de 7 años, según informó el hospital de caridad Emergency7 de Kabul en un comunicado.
No hubo una reivindicación inmediata de la autoría del atentado del miércoles, el último que afecta al país en el año transcurrido desde que los talibanes tomaron el poder.
Associated Press informó, citando a un testigo ocular no identificado, que la explosión fue llevada a cabo por un terrorista suicida.
La filial local del grupo Estado Islámico (EI) ha intensificado los ataques contra los talibanes y los civiles desde que los antiguos insurgentes tomaron el poder el pasado mes de agosto, cuando las tropas estadounidenses y de la OTAN iniciaron su retirada del país.
La semana pasada, los extremistas reivindicaron el asesinato de un destacado clérigo talibán en su centro religioso de Kabul.
Qyaamuddin, uno de los testigos presenciales del incidente del miércoles, dijo a AP que la explosión fue tan potente que creía que podían haber muerto al menos dos docenas de personas.
“Era la hora de la oración de la tarde, y yo estaba asistiendo a la oración con otros, cuando se produjo la explosión”, dijo el Sr. Qyaamuddin.
El gobierno talibán, que tiene un año de existencia, está luchando en varios frentes, con muchos grupos extremistas volviéndose en su contra, la financiación del país congelada y las sanciones internacionales todavía en vigor. Afganistán también está atravesando una crisis humanitaria sin precedentes.
Información adicional de las agencias
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