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El primer presidente de izquierdas de Colombia presentó el lunes un ambicioso plan fiscal que pretende recaudar hasta 11.000 millones de dólares anuales para programas de lucha contra la pobreza.
Gustavo Petro juró su cargo el domingo, y ha prometido luchar contra la desigualdad económica al tiempo que invierte en las zonas rurales que durante mucho tiempo han sido acosadas por la violencia relacionada con las drogas.
Menos de 24 horas después de prestar juramento presidencial, el nuevo presidente presentó al Congreso de su país un plan de reforma fiscal que aumentará los impuestos sobre la renta de las personas ricas e impondrá un gravamen del 10% a las exportaciones de petróleo. El proyecto de ley también incluye un impuesto anual sobre la riqueza de las personas que tienen un patrimonio neto de más de 750.000 dólares, así como impuestos sobre las ventas de refrescos y alimentos altamente procesados.
Petro, que fue miembro de un grupo rebelde, ha dicho que es vital para Colombia aumentar el gasto del Estado para luchar contra la pobreza y aplicar un acuerdo de paz de 2016 con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia que incluye la reforma agraria y programas de desarrollo rural.
La recaudación de impuestos en la nación sudamericana fue de aproximadamente el 19% de su PIB total en 2020, lo que está ligeramente por debajo de la media latinoamericana. Los miembros de la OCDE, una organización formada en su mayoría por países desarrollados, recaudan en promedio el 33% de su PIB en impuestos.
Los gobiernos de Colombia llevan mucho tiempo teniendo problemas con la recaudación de impuestos porque gran parte de la población trabaja en la economía informal. El año pasado, un intento del presidente conservador Iván Duque de aumentar los impuestos sobre la renta y algunos impuestos sobre las ventas provocó protestas masivas en las que murieron más de 50 personas.
El nuevo ministro de Hacienda de Petro dijo que el nuevo plan de reforma fiscal sólo intentará aumentar los impuestos sobre la renta del 2% de las personas más ricas. Ha instado a los ciudadanos más ricos de Colombia a aceptar una mayor tributación, y abordó el tema durante su discurso de investidura.
“Esto no debe ser visto como un castigo o un sacrificio”, dijo. “Es simplemente un pago solidario que alguien afortunado hace a una sociedad que le ha permitido generar riqueza”.
El gobierno también ha propuesto duplicar el impuesto nacional del 10% sobre los dividendos de las acciones, y gravar los productos de las empresas digitales que no tienen sede en Colombia. Esto podría significar que los colombianos tendrían que pagar más impuestos por sus suscripciones a Netflix o por los libros que compren en Amazon.
El Congreso de Colombia tendrá que debatir ahora el plan propuesto por Petro, que se espera que afecte a varias áreas de la economía.
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