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El presidente tunecino Kais Saied prolongó la suspensión del parlamento y anunció un referéndum nacional, casi cinco meses después de destituir a su gobierno y otorgarse amplios poderes.
El anuncio, dijo, fue una respuesta a la demanda de cambio político de muchos tunecinos.
“Para aquellos que están pidiendo un regreso (al antiguo sistema): nunca volveremos a lo que vino antes”, dijo Saied.
En un discurso televisado el lunes por la noche, Saied dio a conocer sus planes para organizar una consulta popular a nivel nacional, que se llevará a cabo tanto en línea como fuera de línea de enero a marzo de 2022.
Luego, la consulta será revisada por un comité y constituirá la base para un referéndum nacional sobre la reforma política que tendrá lugar el 25 de julio de 2022. El referéndum se llevará a cabo en todo Túnez y reflejará “la voluntad del pueblo”, dijo. Saied.
El 25 de julio es el Día de la República de Túnez y cuando Saied congeló el parlamento, destituyó a su gobierno y asumió poderes ejecutivos este verano. En septiembre, Saied suspendió parcialmente la constitución posrevolucionaria del país y se otorgó el poder de gobernar por decreto, lo que generó temores de un retroceso democrático. Los críticos han calificado las medidas de Saied de “golpe de estado”.
En el discurso del lunes, Saied también prorrogó la suspensión del parlamento tunecino hasta las próximas elecciones legislativas, previstas para el 17 de diciembre de 2022. Las elecciones se celebrarán en el marco de los resultados del referéndum.
La línea de tiempo de Saied marca fechas simbólicas en el calendario de la nación del norte de África.
Desde julio, Saied cambió la fecha del aniversario de la revolución de Túnez de 2011, cuando el ex gobernante autocrático Zine el Abidine Ben Ali huyó del país, al 17 de diciembre para marcar el día en 2010 en que el vendedor de frutas Mohammed Bouazzi se prendió fuego, dando inicio a la serie de levantamientos en Túnez que llevaron a lo que ahora se conoce como la Primavera Árabe.
Saied ha dicho con frecuencia que la revolución de Túnez terminó en enero de 2011, usurpada por fuerzas políticas “corruptas” y “egoístas” que redirigieron el camino democrático de Túnez.
Saied anunció sus medidas excepcionales luego de las protestas contra el gobierno, y han demostrado ser muy populares entre un público tunecino fatigado por el declive económico y años de estancamiento político que no han respondido a algunas de las demandas clave de la revolución de 2011.
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Bouazza Ben Bouazza contribuyó a este informe en Túnez.
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