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La primera ministra francesa, Elisabeth Borne, expondrá el miércoles en el Parlamento sus principales prioridades, después de que el Gobierno perdiera la mayoría en las elecciones del mes pasado.
Se espera que se enfrente a las duras críticas de los legisladores tanto de la izquierda como de la derecha, que juntos superan en número a los partidarios del gobierno en la Asamblea Nacional.
La coalición de izquierdas, conocida como Nupes, ha dicho que desencadenará un voto de censura para marcar simbólicamente su oposición al gobierno.
La medida tiene muy pocas posibilidades de éxito, porque es muy poco probable que obtenga la aprobación de más de la mitad de los legisladores de la Asamblea Nacional. El principal grupo de la oposición, la Agrupación Nacional de extrema derecha, ya ha dicho que se abstendrá.
De confirmarse, la votación de censura se organizaría en una semana, pero no antes del viernes por la tarde.
La oficina de Borne dijo que su discurso del miércoles se centrará en temas clave, incluyendo el impulso de los puestos de trabajo, la lucha contra las cuestiones relacionadas con el clima, proporcionando a todas las personas la igualdad de oportunidades y la forma de reforzar la soberanía de Francia en un momento en que la guerra en Ucrania está afectando profundamente a las economías europeas.
Se espera que la primera medida del Gobierno se centre en el poder adquisitivo para ayudar a los hogares con dificultades en medio del aumento de los precios de la energía y los alimentos.
El proyecto de ley se presentará en una reunión del Gabinete el jueves. Incluirá una serie de medidas por valor de 25.000 millones de euros (25.500 millones de dólares) que incluyen el aumento de las pensiones y de algunas prestaciones sociales en un 4%.
El discurso de Borne llega después de que la alianza del presidente Emmanuel Macron sufriera grandes pérdidas en las recientes elecciones parlamentarias. La alianza centrista, ¡Juntos!, fue la que más escaños obtuvo en la Asamblea Nacional, pero se quedó a 44 escaños de la mayoría, ya que los votantes optaron por la coalición de izquierdas o la extrema derecha.
Al contar con el grupo más numeroso de legisladores, el gobierno de Macron sigue teniendo la capacidad de gobernar, pero sólo negociando con los legisladores de la oposición. Para evitar el bloqueo, el partido de Macron y sus aliados quieren negociar compromisos caso por caso con algunos legisladores de la oposición.
El lunes, Macron reorganizó su Gabinete y pidió a su nuevo Gobierno que “se mantenga fuerte” en medio de la guerra de Rusia en Ucrania y “transforme” la muy endeudada economía francesa.
Tres de los 15 ministros de Macron no lograron mantener sus puestos en las elecciones parlamentarias del mes pasado y fueron sustituidos.
Además, Damien Abad, que era ministro de políticas para discapacitados y está siendo investigado por violación y conducta sexual inapropiada, también fue reemplazado. Abad niega firmemente las acusaciones.
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