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Los republicanos de Florida avanzaron el martes un paquete de leyes electorales que establecería una unidad policial para los delitos electorales, adoptando una propuesta impulsada por el gobernador Ron DeSantis.
El Comité de Ética y Elecciones del Senado aprobó el proyecto de ley después de horas de debate. Los demócratas cuestionaron la necesidad de la fuerza de policía electoral y dijo que el proyecto de ley impone nuevas reglas innecesarias en la votación por correo. El senador Travis Hutson, un republicano que patrocina el proyecto de ley, dijo que estaba destinado a salvaguardar las elecciones.
“¿Qué hay de malo en ser las elecciones más seguras de toda la nación? Quiero decir, ¿quién tiene miedo de ser demasiado seguro?”, dijo el senador Travis Hutson, un republicano que patrocina el proyecto de ley. Se refirió a un puñado de casos en los que la gente fue sorprendida votando más de una vez en las elecciones de 2020.
El fraude electoral es excepcionalmente raro y generalmente se detecta. Hay consenso entre los funcionarios electorales y los expertos en que no hubo fraude que pudiera haber influido en los resultados de las últimas elecciones presidenciales, a pesar de las afirmaciones sin fundamento del ex presidente Donald Trump de que las elecciones fueron fraudulentas. Aun así, los republicanos de los estados de todo el país aprobaron el año pasado una oleada de nuevas normas de votación que endurecieron el acceso al voto por correo y al voto anticipado.
DeSantis, un republicano que se presenta a la reelección y que aspira a una candidatura presidencial en 2024, ha elogiado al mismo tiempo que las elecciones de Florida de 2020 se desarrollaron sin problemas y ha sugerido que se necesitan más normas para evitar el fraude. El año pasado, meses después de que firmara un amplio conjunto de restricciones a la votación, el gobernador planteó la necesidad de una fuerza policial para manejar los delitos electorales, así como reglas adicionales para disuadir las infracciones, lo que subraya cómo las falsas afirmaciones de Trump siguen influyendo en la formulación de políticas republicanas.
El proyecto de ley crearía una Oficina de Crímenes Electorales y Seguridad bajo el Departamento de Estado para investigar el fraude electoral y permitir al gobernador nombrar agentes especiales de la ley para perseguir los casos, una propuesta que DeSantis vinculó previamente a casos no especificados de fraude electoral.
La senadora Tina Scott Polsky, demócrata, dijo que la posible creación de la unidad de policía electoral tenía raíces políticas. Dijo que DeSantis pretendía satisfacer a los miembros “ultraderechistas” del partido republicano que creen que la elección fue robada a Trump.
“¿Qué estamos haciendo aquí sino jugando a la política, jugando a la política con el voto, el derecho más fundamental de nuestros constituyentes, de todos nuestros ciudadanos en Florida?”, dijo, y agregó: “Creo que deberíamos tener miedo de un escuadrón de matones de la policía electoral política que puede apuntar a comunidades específicas.”
Entre otras cosas, el proyecto de ley también requeriría que los votantes escribieran números de identificación en las papeletas de voto por correo y crearía un nuevo sobre para las papeletas de voto por correo. Los supervisores electorales también tendrían que mantener con más frecuencia sus listas de votantes y las penas por la llamada “recolección de papeletas” se aumentarían a un delito grave, según la medida.
Un puñado de supervisores electorales del condado planteó problemas con los elementos técnicos del proyecto de ley, incluyendo los costos y el procesamiento de los sobres adicionales para las votaciones por correo y con las normas de la propuesta en torno al mantenimiento de la lista de votantes.
“Por favor, por favor, queremos ser su fuente de información. Consulten con nosotros antes de seguir adelante con esto. Agradecemos la oportunidad de trabajar con ustedes”, dijo al comité el supervisor del condado de Lake, Alan Hays, ex legislador estatal.
El proyecto de ley pasa ahora a otro comité de la cámara estatal, controlada por el Partido Republicano.
La propuesta sigue a una amplia ley de votación aprobada por la legislatura de Florida, controlada por el GOP, y firmada por DeSantis el año pasado, que puso nuevas reglas en los buzones de votación y requirió un número de licencia de conducir, un número de identificación estatal o los últimos cuatro dígitos de un número de seguro social para solicitar una boleta por correo. Esa ley es objeto de un juicio federal, que comenzó esta semana, tras ser impugnada por grupos de defensa del derecho al voto.
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