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El Reino Unido, Estados Unidos y la Unión Europea se preparan para imponer a Rusia nuevas sanciones en respuesta a las matanzas de civiles en el norte de Ucrania, que han sido condenadas como crímenes de guerra.
Las sanciones del miércoles se dirigirán a funcionarios y a sus familias -los informes sugieren que las hijas de Vladimir Putin, Maria Vorontsova, de 36 años, y Katerina Tikhonova, de 35, se verán afectadas por las medidas estadounidenses y de la UE-, así como a los bancos rusos y a las empresas estatales, según ha indicado la Casa Blanca.
Las sanciones propuestas por la UE prohibirían la compra de carbón ruso, impedirían la entrada de barcos rusos en los puertos de la UE y suspenderían el comercio por valor de casi 20.000 millones de euros (16.000 millones de libras).
En Londres, una fuente del Ministerio de Asuntos Exteriores dijo que también se harían anuncios por parte del Reino Unido.
Se produce después de que aparecieran informes sobre civiles que fueron encontrados con disparos a corta distancia, algunos con las manos atadas a la espalda, tirados en las calles de Bucha, al norte de Kiev, tras la retirada de las fuerzas rusas de la ciudad.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, declaró que las tropas rusas habían cometido los “crímenes de guerra más terribles” desde la Segunda Guerra Mundial, al afirmar que personas inocentes habían sido fusiladas a sangre fría en sus casas o en la calle y aplastadas en sus coches por los tanques, mientras que muchas mujeres habían sido violadas.
La ministra de Asuntos Exteriores, Liz Truss, dijo que las acciones económicas llevadas a cabo hasta ahora estaban teniendo un “impacto paralizante” y “empujando a la economía rusa de vuelta a la era soviética”.
Dijo que las sanciones habían congelado más de 350.000 millones de dólares (266.000 millones de libras) del “cofre de guerra de Putin”, haciendo que no estuviera disponible más del 60% de los 604.000 millones de dólares (459.000 millones de libras) de reservas de divisas del régimen.
La ministra se reunirá con sus homólogos de la OTAN en Bruselas el miércoles, antes de la reunión plenaria de los ministros de Asuntos Exteriores de la alianza del jueves.
La reunión se produce mientras los servicios de inteligencia de defensa británicos advierten de una catástrofe humanitaria en el puerto ucraniano de Mariupol, que ha sido asediado y bombardeado por las fuerzas rusas.
El Ministerio de Defensa dijo que la situación humanitaria en la ciudad seguía empeorando, y que la mayoría de los 160.000 residentes restantes se habían quedado sin luz, comunicación, medicamentos, calefacción o agua.
El secretario de Sanidad, Sajid Javid, dijo que la imagen de una madre ucraniana que garabateó los datos de contacto en la espalda de su hija de dos años por si ella y el resto de la familia morían en el conflicto “refuerza la determinación de todos nosotros”.
Boris Johnson hizo un llamamiento directo al pueblo ruso para que rechace la guerra de Putin en Ucrania, que calificó de “mancha” en el honor de su país.
En un mensaje de vídeo, el primer ministro instó a los rusos a descargarse redes privadas virtuales (VPN) para poder eludir los controles mediáticos del Kremlin y ver por sí mismos las atrocidades que se cometen en su nombre.
Hablando en ruso, el Sr. Johnson dijo a Rusia: “Su presidente está acusado de cometer crímenes de guerra. Pero no puedo creer que esté actuando en su nombre”.
Su intervención se produjo después de que Zelensky utilizara un dramático discurso ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para pedir la creación de un tribunal especial al estilo de los tribunales de Nuremberg, utilizados para juzgar a los principales nazis, para llevar a los responsables ante la justicia.
El Kremlin respondió afirmando que las imágenes de civiles supuestamente asesinados por soldados rusos en Bucha eran “noticias falsas” que habían sido montadas por los propios ucranianos.
Pero el Ministerio de Defensa del Reino Unido dijo que el análisis de las imágenes por satélite del 21 de marzo -cuando la ciudad todavía estaba ocupada por los rusos- mostraba al menos ocho cuerpos tendidos en una calle.
En su mensaje, el Sr. Johnson dijo que las “atrocidades” cometidas por las fuerzas rusas -incluyendo la violación y la masacre de civiles inocentes- eran tan impactantes que el Sr. Putin había tratado deliberadamente de ocultar la verdad a su pueblo.
“Su presidente sabe que si ustedes pudieran ver lo que está sucediendo, no apoyarían su guerra”, dijo.
“Sabe que estos crímenes traicionan la confianza de cada madre rusa que despide con orgullo a su hijo cuando se dirige a unirse al ejército.
“Y sabe que son una mancha en el honor de la propia Rusia. Una mancha que sólo crecerá más grande y más indeleble cada día que esta guerra continúe”.
Información adicional de Press Association
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