Los abogados del senador Lindsey Graham dicen que no cumplirá con una citación que se le ha emitido como parte de una investigación del gran jurado del condado de Fulton, Georgia, sobre la presión del ex presidente Donald Trump para anular la victoria electoral de Joe Biden en 2020 en el Estado del Melocotón.
Los abogados acusaron además a la Sra. Willis de llevar a cabo una “expedición de pesca” y de “trabajar de acuerdo con el Comité del 6 de enero en Washington”.
“Cualquier información de una entrevista o declaración con el senador Graham se compartiría inmediatamente con el Comité del 6 de enero”, dijeron los abogados, aunque no ofrecieron ninguna prueba para apoyar sus afirmaciones. Por ley, las investigaciones del gran jurado se consideran secretas y los fiscales pueden enfrentarse a fuertes sanciones si revelan información en circunstancias no autorizadas.
“El senador Graham estaba en su derecho de discutir con funcionarios estatales los procesos y procedimientos en torno a la administración de las elecciones”, dijeron. “Si se mantiene, la citación emitida hoy erosionaría el equilibrio constitucional de poder y la capacidad de un miembro del Congreso para hacer su trabajo”.
Añadieron que el Sr. Graham “tiene previsto acudir a los tribunales, impugnar la citación y espera prevalecer”.
No está claro sobre qué base el Sr. Graham podría impugnar la citación del gran jurado, que fue aprobada por un juez de Georgia que encontró que el Sr. Graham hizo una llamada telefónica en diciembre de 2020 al Secretario de Estado de Georgia Brad Raffensperger, durante la cual el senador de Carolina del Sur pidió al principal funcionario electoral de Georgia que “reexaminara ciertos votos en ausencia emitidos en Georgia con el fin de explorar la posibilidad de un resultado más favorable” para el Sr. Trump, el primer candidato republicano en perder los votos electorales del Estado del melocotón desde que el entonces gobernador de Arkansas, Bill Clinton, derrotó a George HW Bush en las elecciones presidenciales de 1992.
Aunque la cláusula de “discurso o debate” de la Constitución de EE.UU. -que dice que los miembros de la Cámara y el Senado “no serán interrogados en ningún otro lugar” por “cualquier discurso o debate en cualquiera de las dos cámaras”- se ha interpretado para dar a los miembros y a su personal inmunidad de procesamiento o demandas civiles por actos realizados como parte de sus funciones oficiales, la llamada del Sr. Graham al Sr. Raffensperger no se hizo en ninguna capacidad oficial.
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