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El teléfono móvil de Liz Truss fue hackeado por agentes que presuntamente trabajaban para el ruso Vladimir Putin durante la carrera por el liderazgo tory que la impulsó brevemente a Downing Street, según un explosivo informe.
Los partidos de la oposición han exigido que se investigue urgentemente si el teléfono de la entonces ministra de Asuntos Exteriores fue intervenido por espías rusos este verano y, en caso afirmativo, por qué se ocultó el asunto al público.
En su condición de primer ministro saliente, Boris Johnson habría sido informado inmediatamente del hackeo y habría acordado con su secretario de gabinete Simon Case un “apagón informativo total”.
Los piratas informáticos habrían accedido a información sensible, incluyendo conversaciones con funcionarios extranjeros sobre la guerra en Ucrania y detalles sobre envíos de armas.
Los mensajes entre la Sra. Truss y su futuro canciller de 38 días, Kwasi Kwarteng, en los que ambos criticaban al Sr. Johnson, se encontraban entre los mensajes de un año que fueron comprometidos, lo que llevó a un potencial riesgo de chantaje, se afirma.
El teléfono ha sido colocado en una caja fuerte cerrada en un lugar seguro del gobierno, dijo una persona al Mail on Sunday, que citó en su informe fuentes no identificadas con conocimiento del incidente.
“Esto causó un absoluto pandemónium”, dijo otro al periódico, acusando al Sr. Johnson y al Sr. Case de suprimir el asunto.
“No es una buena imagen para los servicios de inteligencia si el teléfono del secretario de Asuntos Exteriores puede ser saqueado tan fácilmente en busca de mensajes personales embarazosos por agentes que presuntamente trabajan para la Rusia de Putin”.
La Sra. Truss habría cambiado su número de móvil de 10 años poco antes de entrar en Downing Street, y se afirma que su dispositivo comprometido se encuentra ahora en una caja fuerte cerrada dentro de un lugar seguro del gobierno.
La secretaria de Interior en la sombra, Yvette Cooper, dijo: “Hay cuestiones de seguridad nacional inmensamente importantes planteadas por un ataque como éste de un estado hostil que habrán sido tomadas muy en serio por nuestras agencias de inteligencia y seguridad.
“También hay graves cuestiones de seguridad en torno a por qué y cómo se ha filtrado o divulgado esta información en este momento que también debe ser investigada con urgencia.
“Es esencial que todas estas cuestiones de seguridad se investiguen y se aborden al más alto nivel y tenemos que saber que el gobierno reconoce la gravedad de esto y la importancia de proteger plenamente nuestra seguridad nacional.”
La portavoz de Asuntos Exteriores del Partido Liberal Demócrata, Layla Moran, pidió “una investigación independiente urgente para descubrir la verdad”, y añadió: “¿Fue el teléfono de Liz Truss hackeado por Rusia, hubo un apagón informativo y si es así por qué?
“Si resulta que esta información se ocultó al público para proteger la candidatura al liderazgo de Liz Truss, sería imperdonable”.
Tobias Ellwood, presidente del Comité de Defensa de los Comunes, dijo a Sky News: “He visto estos informes. No sé el valor o las fuentes y demás. Es algo que el comité hermano, el Comité de Inteligencia y Seguridad, creo que debe investigar más a fondo”.
El gobierno dijo que no comentaría sobre los acuerdos de seguridad de los individuos, pero un portavoz añadió: “El gobierno tiene sistemas robustos para proteger contra las amenazas cibernéticas.
“Eso incluye sesiones informativas de seguridad regulares para los ministros, y asesoramiento sobre la protección de sus datos personales y la mitigación de las amenazas cibernéticas”.
Los informes sobre el hackeo llegan mientras el primer ministro Rishi Sunak se resiste a las demandas de iniciar una investigación sobre Suella Braverman por su violación de la seguridad.
El primer ministro volvió a nombrarla como ministra del Interior sólo seis días después de que se viera obligada a abandonar el cargo tras compartir un documento sensible con un diputado conservador desde un correo electrónico personal sin permiso.
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