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La NASA ha puesto en órbita con éxito el telescopio espacial James Webb, lo que brinda a los científicos la oportunidad de mirar hacia atrás en la historia del universo más que nunca.
El telescopio se lanzó sobre un cohete europeo Ariane 5 desde el sitio de Kourou, Guayana Francesa en América del Sur, el 25 de diciembre. Inicialmente programado para la víspera de Navidad, el lanzamiento se pospuso un día debido a un pronóstico de vientos de alto nivel en el puerto espacial.
La preparación del proyecto comenzó en 1996 y la construcción se completó en 2016.
Todavía quedan varias etapas por recorrer hasta que el telescopio esté operativo: se debe completar un complejo procedimiento de despliegue que durará hasta dos semanas. Eventualmente, la nave estará a un millón de millas de nuestro planeta.
Hay 344 partes que deben desplegarse de forma remota, un procedimiento increíblemente complejo que la agencia espacial nunca ha intentado antes. Muchos de los mecanismos no tienen respaldo, por lo que si surge algún problema, todo el esfuerzo podría llegar a su fin.
El enorme telescopio de $ 10 mil millones funcionará en conjunto con el telescopio espacial Hubble, pero es mucho más grande que su predecesor de 31 años. El espejo de 6,5 metros del telescopio James Webb es más del doble que el del Hubble de 2,4 metros, lo que lo hace entre 10 y 100 veces más sensible que las naves más antiguas.
El espejo está hecho de 18 segmentos hexagonales de berilio y está cubierto por una pantalla de 21 metros por 14 metros para mantener sus instrumentos científicos a una temperatura constante de menos 240 grados Celsius para que funcione correctamente.
Webb intentará mirar hacia atrás en el tiempo 13.700 millones de años, apenas 100 millones de años después del Big Bang que formó el universo cuando las estrellas originales estaban tomando forma. Los científicos están ansiosos por ver qué tan cerca, si acaso, se parecen estas galaxias iniciales a nuestra Vía Láctea actual.
El evento se transmitió en vivo en el sitio web de la NASA. Cuando se lanzó el cohete, el portavoz de la NASA Rob Navias dijo: “Despegue, desde una selva tropical hasta el borde del tiempo, James Webb comienza un viaje de regreso al nacimiento del universo”.
Se esperan entre cinco y diez años de observaciones del telescopio, que será administrado por el Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial en Baltimore.
“Personalmente, creo que incluso con todo el bombo publicitario, Webb seguirá superando las expectativas”, dijo Ori Fox del instituto unos días antes del lanzamiento. “Muchos de los que se consideran los descubrimientos más inspiradores de Hubble no formaban parte del plan original”.
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