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El Tribunal Supremo ha ordenado al gobierno de Biden que detenga sus planes de dejar de utilizar el Título 42, una polémica directriz utilizada por las autoridades fronterizas estadounidenses para rechazar a muchos inmigrantes en los últimos dos años.
El Presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, emitió la suspensión el lunes por la tarde, mientras el Tribunal Supremo examina un caso de fiscales generales del Partido Republicano que pretenden mantener la política en vigor. Aunque la mayoría de las restricciones y directrices de Covid han desaparecido, el efecto de la política del Título 42 para frenar la oleada de inmigrantes que buscan asilo en la frontera sur ha llevado a los estados conservadores a exigir que se mantenga.
Esos mismos estados conservadores advierten de que el fin de las restricciones del Título 42 supondrá una oleada de inmigrantes en la frontera sur que tratarán de cruzar ilegalmente.
“Deshacerse del Título 42 pondrá en peligro de forma imprudente e innecesaria a más estadounidenses y migrantes al exacerbar la catástrofe que se está produciendo en nuestra frontera sur”, afirmó el fiscal general de Arizona.
La administración Biden tiene hasta el final del martes para presentar una respuesta. En un principio, la administración tenía previsto levantar las restricciones el miércoles.
Un fallo anterior que impedía a la administración Biden eliminar la restricción puede ayudar al caso del Partido Republicano, pero un caso distinto que cuestionaba la validez de la restricción en general dio lugar a que otro tribunal decidiera que el gobierno debe ser impedido de aplicar el Título 42. Los conservadores dicen que ese resultado fue manipulado por el gobierno. Los conservadores afirman que ese resultado fue manipulado por la administración Biden, que ha apelado el fin del Título 42 en su conjunto, pero no la orden individual que busca el fin de su aplicación para el 21 de diciembre.
La enrevesada batalla en torno a la norma puede explicar en cierta medida por qué los ataques del Partido Republicano centrados en la cuestión de la inmigración no lograron aterrizar con eficacia durante las elecciones de mitad de mandato de 2022; en las próximas semanas y meses, el gobierno de Biden tuvo la oportunidad de ver el primer movimiento importante en décadas sobre la cuestión de la inmigración en Washington, ya que los senadores moderados de ambos partidos se reunieron para discutir la aprobación de reformas importantes, sin embargo, esas negociaciones no alcanzaron los 60 votos necesarios para aprobar dicha legislación.
La posibilidad de aprobar una legislación seria que aborde la frontera entre EE.UU. y México sigue viva, pero mucho más tenue de cara al nuevo Congreso, donde los republicanos tendrán una mayoría muy ajustada en la Cámara de Representantes y los demócratas habrán ampliado en un escaño su igualmente tenue ventaja en el Senado.
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