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El último plan de la Casa Blanca perdonaría 10.000 dólares de deuda estudiantil por prestatario

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Los funcionarios de la Casa Blanca están planeando actualmente cancelar 10.000 dólares de deuda estudiantil por prestatario, después de meses de deliberaciones internas sobre cómo estructurar la condonación de préstamos para decenas de millones de estadounidenses, dijeron tres personas con conocimiento del asunto.

El presidente Biden esperaba hacer el anuncio tan pronto como este fin de semana en la graduación de la Universidad de Delaware, dijeron las personas, pero ese calendario ha cambiado después de la masacre del martes en Texas.

Los últimos planes de la Casa Blanca preveían limitar la condonación de la deuda a los estadounidenses que ganaran menos de 150.000 dólares en el año anterior, o menos de 300.000 dólares para las parejas casadas que presenten una declaración conjunta, dijeron dos de las personas. No estaba claro si la administración exigirá simultáneamente que los intereses y los pagos se reanuden a finales de agosto, cuando está previsto que expire la actual pausa.

Las personas, que hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizadas a discutir las deliberaciones, advirtieron que algunos detalles de estos planes podrían cambiar antes de que la Casa Blanca haga oficial la decisión.

La probable decisión se produce después de meses de incertidumbre sobre el destino de la deuda estudiantil de decenas de millones de estadounidenses, con Biden sonando a veces escéptico sobre la cancelación de los préstamos, pero presionado por el desplome de sus índices de aprobación entre los jóvenes votantes antes de las elecciones de noviembre. La decisión también provocará nuevas peleas entre demócratas y republicanos sobre el gasto federal y podría ser un tema definitorio en la campaña electoral, ya que los legisladores del Partido Republicano ya han dicho que la idea equivale a un despilfarro que beneficia principalmente a los profesionales acaudalados con estudios universitarios.

La Casa Blanca dijo que no se ha tomado una decisión final sobre el asunto. Biden dijo que llegaría a una decisión sobre la deuda estudiantil en el “próximo par de semanas” el 28 de abril, hace casi un mes.

“Todavía no se ha tomado ninguna decisión”, dijo Vedant Petal, un portavoz de la Casa Blanca, en un comunicado el jueves.

Liquidar 10.000 dólares de deuda por prestatario podría costar unos 230.000 millones de dólares, según estimaciones del Comité para un Presupuesto Federal Responsable, un grupo de expertos no partidista. Sin embargo, la reanudación de los pagos a los prestatarios, que están en suspenso desde marzo de 2020, aportaría dinero adicional a las arcas federales. El think tank dijo en marzo que la pausa de los pagos había costado al gobierno federal 100.000 millones de dólares y que su mantenimiento supondría unos 50.000 millones de dólares al año. The Washington Post había informado previamente de que la administración estaba considerando la posibilidad de hacer que sólo la deuda de los estudiantes universitarios pudiera ser condonada.

La Casa Blanca ha estado buscando medidas económicas que pueda promulgar sin la aprobación del Congreso desde el colapso del programa económico Build Back Better de Biden a finales del año pasado. Pero, aunque la administración se ha fijado en las encuestas que sugieren que una gran mayoría de los jóvenes votantes apoyan la cancelación de la deuda, la política de la medida sigue sin estar clara. Los índices de aprobación del Sr. Biden sobre la economía se han desplomado en medio de las subidas de precios más rápidas de las últimas cuatro décadas, y sus planes para mejorar la vivienda, la atención sanitaria y la pobreza infantil se han visto bloqueados por el fracaso de las negociaciones con el senador Joe Manchin, demócrata de Virginia. Los republicanos pondrán en la picota la decisión por haber sido tomada unilateralmente, sin contar con el Congreso, e incluso algunos demócratas centristas se muestran incómodos con la idea.

El Sr. Biden dijo en una reunión de legisladores hispanos el mes pasado que estaba abierto a cancelar la deuda de los préstamos estudiantiles. Se había comprometido durante la campaña presidencial de 2020 a perdonar al menos 10.000 dólares de deuda por prestatario, después de que la senadora Elizabeth Warren, demócrata de Massachusetts, y otros liberales impulsaran la idea.

La mayoría de los 41 millones de prestatarios estudiantiles del país se beneficiarían. La cancelación de la deuda de 10.000 dólares para todos los que tienen préstamos estudiantiles federales liquidaría los saldos de aproximadamente un tercio de los prestatarios y reduciría la deuda total al menos a la mitad para otro 20%, según los últimos datos del Departamento de Educación. Sin embargo, no está claro cómo afectarían los límites de ingresos a estas cifras. Se estima que el 97% de toda la deuda estudiantil estaba en manos de personas que ganaban por debajo del umbral de 150.000 dólares por persona y 300.000 dólares por pareja en 2019, según Matt Bruenig, fundador del think tank de izquierdas People’s Policy Project.

No se espera que la Casa Blanca dé a conocer de inmediato todos los detalles del proceso que utilizarían los prestatarios para cancelar sus deudas. Pero podría ser bastante complicado desde el punto de vista logístico.

Por ejemplo, la administración está imponiendo un límite de ingresos a quienes califican para asegurar que las personas con altos ingresos no reciban ayuda del gobierno que no necesitan. Pero hay obstáculos para utilizar los ingresos para orientar la reducción de la deuda. La página webLos departamentos de Educación y Hacienda no pueden compartir fácilmente la información fiscal de los prestatarios, y la legislación que suaviza esta restricción no entrará en vigor hasta dentro de dos años.

Basarse en los datos fiscales también podría excluir a millones de estadounidenses de bajos ingresos que no declaran impuestos pero sí deben préstamos estudiantiles. Un proceso de autodeclaración, por el que las personas certificarían que sus ingresos cumplen los requisitos, podría plantear dificultades al gobierno para verificar la información. Incluso pedir a los prestatarios que soliciten la condonación podría limitar el alcance de la política. Y como probablemente el Departamento de Educación tardará meses en aplicar cualquier programa, los beneficios políticos podrían ser limitados.

Los defensores de la condonación de la deuda estudiantil, incluyendo a Warren y al líder de la mayoría del Senado Chuck Schumer, demócrata de Nueva York, han instado a la administración a ir mucho más allá y cancelar al menos 50.000 dólares por prestatario, si no todos los préstamos educativos federales pendientes. Dicen que reducir la carga de los préstamos estudiantiles ayudaría a estimular la economía y a cerrar la brecha de riqueza racial, ya que los prestatarios negros cargan con una cantidad desproporcionada de deuda. Antes de un mitin en la Casa Blanca a principios de este mes, Wisdom Cole, el director nacional de la división de jóvenes y universitarios de la NAACP, dijo: “La comunidad negra sigue encadenada por la deuda estudiantil, y la cancelación de 10.000 dólares no romperá las cadenas.”

Pero algunos economistas han argumentado que prodigar la condonación de préstamos a los graduados universitarios es una política irresponsable y costosa. El Committee for a Responsible Federal Budget (Comité para un Presupuesto Federal Responsable) estimó que aproximadamente el 70% de los beneficios irán a parar a la mitad superior del espectro de ingresos. Los críticos de la condonación de la deuda también dicen que no hace nada para abordar los costes universitarios o el problemático sistema de préstamos. No está claro si las personas que necesitan pedir un préstamo para empezar la universidad este otoño, por ejemplo, podrían optar a la condonación de nuevos préstamos.

Aun así, incluso limitando la condonación a 10.000 dólares, el gobierno de Biden podría ayudar a las personas que posiblemente más necesiten la cancelación: los que están en mora de sus préstamos. Los impagos y la morosidad de los préstamos estudiantiles se concentraban entre los prestatarios con menos de 10.000 dólares de deuda antes de la pausa de los pagos de los préstamos estudiantiles federales, según la Reserva Federal. Los economistas de la Fed dicen que los prestatarios con menos deuda suelen tener dificultades para pagar sus préstamos, en parte porque no completaron un título necesario para mejorar sus ingresos.

La reducción de los parámetros de la condonación de préstamos está en consonancia con el enfoque específico de la administración Biden para el alivio de la deuda. La administración ya ha eliminado 18.500 millones de dólares en préstamos para más de 750.000 personas ampliando o racionalizando temporalmente los programas de condonación existentes, incluidos los diseñados para ayudar a los funcionarios públicos y a los prestatarios defraudados por sus universidades.

WASHINGTON POST

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