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Se espera que la alianza centrista del presidente francés Emmanuel Macron mantenga su mayoría parlamentaria tras la primera ronda de votación en las elecciones, pero probablemente tendrá muchos menos escaños que hace cinco años, según las proyecciones.
Las proyecciones basadas en los resultados parciales de las elecciones muestran que, a nivel nacional, el partido de Macron y sus aliados obtuvieron alrededor del 25% de los votos.
Esta cifra estaba a la par de las estimaciones de una nueva coalición de izquierdas formada por partidarios de la izquierda dura, los socialistas y los Verdes. Sin embargo, se prevé que los candidatos de Macron ganen en un mayor número de distritos que sus rivales de izquierdas, lo que daría la mayoría al presidente.
El sistema de votación a dos vueltas de Francia es complejo y no es proporcional al apoyo nacional a un partido. En las contiendas que no tuvieron un ganador decisivo el domingo, hasta cuatro candidatos que obtuvieron al menos un 12,5% de apoyos cada uno competirán en una segunda vuelta el 19 de junio.
Tras la reelección de Macron en mayo, su coalición centrista buscaba una mayoría absoluta que le permitiera poner en práctica sus promesas electorales, que incluyen recortes fiscales y el aumento de la edad de jubilación de 62 a 65 años.
Sin embargo, la proyección del domingo muestra que el partido de Macron y sus aliados podrían tener problemas para conseguir más de la mitad de los escaños en la Asamblea, mucho menos que hace cinco años, cuando obtuvieron 361 escaños. Las agencias de sondeos estiman que sus centristas podrían ganar entre 255 y más de 300 escaños, mientras que la coalición de izquierdas liderada por Jean-Luc Melenchon podría obtener más de 200 escaños.
La participación del domingo alcanzó un mínimo histórico para unas elecciones parlamentarias, con menos de la mitad de los 48,7 millones de votantes franceses.
La primera ministra, Elisabeth Borne, declaró: “Tenemos una semana de acción, una semana para convencer, una semana para obtener una mayoría fuerte y clara. “Frente a la situación en el mundo y la guerra a las puertas de Europa, no podemos correr el riesgo de la inestabilidad”, añadió, instando a los votantes a reunirse detrás de la alianza del Sr. Macron”en la segunda ronda. Frente a los extremos, no cederemos”
Melenchon, que esperaba que las elecciones le auparan al puesto de primer ministro, no aceptó las proyecciones preliminares e insistió en que su coalición había quedado primera.
Instó a los franceses a elegir a los candidatos de su coalición en la segunda vuelta y “rechazar definitivamente los proyectos condenados al fracaso de la mayoría de Macron”
Su plataforma incluía un aumento significativo del salario mínimo, la reducción de la edad de jubilación a 60 años y el bloqueo de los precios de la energía, que se han disparado debido a la guerra en Ucrania.
Aunque Macron venció a su rival de extrema derecha Marine Le Pen en la segunda vuelta presidencial, las elecciones parlamentarias francesas son tradicionalmente una carrera difícil para los candidatos de extrema derecha. Los rivales de otros partidos tienden a coordinarse o a hacerse a un lado para aumentar las posibilidades de derrotar a los candidatos de extrema derecha en la segunda vuelta.
Las proyecciones indican que el partido de extrema derecha de Le Pen, la Agrupación Nacional, podría obtener entre 10 y 30 escaños, frente a los ocho de hace cinco años. Si supera el umbral de los 15 escaños, podrá formar grupo parlamentario y ganar más poder en la Asamblea.
Le Pen, que se presentó a la reelección en su feudo de Henin-Beaumont, en el norte de Francia, elogió los resultados del domingo.
“El próximo domingo, es importante no dejar que Emmanuel Macron obtenga una mayoría absoluta, de la que abusará para aplicar sus métodos egocéntricos y brutales e imponer su proyecto antisocial”, dijo.
Llamó a los electores a votar en blanco o a no acudir a las urnas en las circunscripciones que sólo tienen candidatos de Macron o Melenchon.
Información adicional de Associated Press.
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