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El Gobierno francés presentó el jueves un paquete de medidas por valor de 20.000 millones de euros (20.300 millones de dólares) para ayudar a los hogares con dificultades a hacer frente a las consecuencias de la guerra en Ucrania, como el aumento de los precios de la energía y los alimentos.
La legislación propuesta se presentó en una reunión del Gabinete el jueves, un día después de que la Primera Ministra francesa, Elisabeth Borne, detallara la estrategia económica del Gobierno en el Parlamento.
Las medidas se debatirán en el Parlamento a finales de este mes y se consideran una prueba crucial para la capacidad de gobierno.
La alianza centrista del presidente Emmanuel Macron fue la que más escaños obtuvo en la Asamblea Nacional en las elecciones del mes pasado, pero perdió su mayoría directa, mientras que una coalición de izquierdas y la extrema derecha obtuvieron grandes ganancias, convirtiéndose en fuertes fuerzas de oposición. El Gobierno se ofreció a alcanzar compromisos caso por caso con otras fuerzas políticas para evitar el bloqueo legislativo.
La medida del gobierno se produce cuando la inflación anual alcanzó un récord del 8,6% para los 19 países que utilizan el euro, hinchada por un enorme aumento de los costes de los alimentos y la energía, alimentado en parte por la guerra en Ucrania.
En Francia, la inflación anual se estima en un 6,5%, entre las más bajas de la zona euro.
“La causa de la inflación no hay que buscarla en un problema económico estructural francés, sino en el conflicto ucraniano”, dijo el portavoz del Gobierno, Olivier Veran. “De ninguna manera dejaremos que los franceses se preocupen por no poder pagar sus compras como antes”.
Las medidas incluyen el aumento de las pensiones, que dará a los beneficiarios de la pensión estatal básica 62 euros (63 dólares) adicionales al mes, dijo Veran.
Una serie de ayudas sociales también aumentarán un 4%. El Ministro de Finanzas, Bruno Le Maire, dijo que se incluirán las prestaciones familiares, lo cual “es justo, porque las familias con hijos son las más afectadas por la subida de los precios de los alimentos. Cuando tienes tres o cuatro bocas que alimentar, es necesariamente caro”.
Los funcionarios verán incrementado su salario en un 3,5%.
“Hoy, ¿qué es lo que más penaliza la vida cotidiana de nuestros conciudadanos? La vivienda, el combustible y los alimentos. Sobre estas tres partidas, vamos a aportar tres respuestas masivas y eficaces”, dijo Le Maire.
Las subidas de los alquileres se limitarán este año a un máximo del 3,5%.
En cuanto al combustible, la actual rebaja de 18 céntimos por litro será sustituida por un cheque de 100 a 200 euros (101 a 203) para los trabajadores con ingresos bajos y medios que necesiten utilizar su coche, lo que representa unos 12 millones de hogares.
Además, 9 millones de familias más pobres recibirán un cheque de 100 euros y 50 euros adicionales por niño para comprar alimentos, dijo Le Maire.
El Gobierno también tiene previsto mantener el tope actual de los precios de la electricidad y la congelación del precio del gas hasta finales de año.
También se anima a las empresas privadas que obtengan beneficios a ofrecer a sus empleados una bonificación anual de hasta 6.000 euros (6.092 dólares) libre de impuestos para los empleados y deducible para los empresarios, en línea con una promesa de campaña de Macron, que fue reelegido en abril.
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