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El ministro de Defensa de Israel aprobó lo que llamó una serie de “medidas de fomento de la confianza” después de acoger a Mahmoud Abbas en la primera reunión del presidente palestino dentro de Israel en una década.
Benny Gantz sostuvo las raras conversaciones con Abbas en su casa en Tel Aviv, donde discutieron la coordinación de seguridad entre Israel y la Autoridad Palestina de Abbas, que administra partes de la ocupada Cisjordania.
Marcó la segunda reunión entre los dos líderes en seis meses y provocó débiles esperanzas de algún movimiento en las negociaciones de paz, muertas hace mucho tiempo.
El funcionario palestino Hussein al-Sheikh dijo que en las conversaciones del martes discutieron la “importancia de crear un horizonte político” para resolver el conflicto palestino-israelí.
Sin embargo, en una declaración el miércoles, el Ministerio de Defensa israelí habló solo de “medidas de fomento de la confianza”, incluida la facilitación de la entrada de cientos de empresarios palestinos y personalidades importantes a Israel y la aprobación del estatus de residencia para miles en Cisjordania y la Franja de Gaza. También incluyó la transferencia de pagos de impuestos a la Autoridad Palestina.
El propio Gantz no mencionó las negociaciones de paz, que fracasaron en 2014 después del colapso de las conversaciones respaldadas por Estados Unidos.
“Discutimos la implementación de medidas económicas y civiles, y enfatizamos la importancia de profundizar la coordinación de seguridad y prevenir el terror y la violencia, para el bienestar tanto de israelíes como de palestinos”, dijo.
Sin embargo, las medidas son un pequeño paso adelante.
Israel controla el registro de la población palestina, dejando a miles de personas sin estatus legal, lo que afecta enormemente su libertad de movimiento.
El Ministerio de Defensa israelí dijo después de la reunión que Gantz aprobó el registro de unos 9.500 palestinos, incluidos 6.000 en Cisjordania, que habían estado viviendo en el territorio, capturado por Israel en la guerra de 1967, sin estatus oficial.
Otras 3.500 personas de Gaza también recibirían documentación de residencia, dijo el ministerio.
Israel también recauda cientos de millones de dólares en impuestos en nombre de la Autoridad Palestina, una fuente vital de financiamiento, como parte de los acuerdos de paz provisionales firmados en la década de 1990. Sin embargo, Israel ha retenido fondos por la concesión de estipendios por parte de la Autoridad Palestina a miles de familias que han tenido familiares muertos, heridos o encarcelados en el conflicto, una medida que, según Israel, está financiando el terrorismo.
La transferencia de los pagos de impuestos a la Autoridad Palestina será un refuerzo de financiación muy necesario para los palestinos con problemas de liquidez.
Sin embargo, el gobierno israelí sigue dividido amargamente sobre la cuestión de los palestinos y el estado palestino. La coalición del primer ministro Naftali Bennett incluye un amplio espectro de opiniones políticas, desde partidarios de la derecha de los asentamientos hasta partidos liderados por ciudadanos palestinos de Israel.
El propio Sr. Bennett es un partidario de los asentamientos, que se consideran ilegales según el derecho internacional, y se opone abiertamente a un futuro estado de Palestina.
Su gobierno hasta ahora no ha mostrado interés en reactivar las conversaciones de paz, pero ha dicho que quiere reducir las crecientes tensiones entre las dos partes mejorando las condiciones de vida en la ocupada Cisjordania.
Yair Lapid, el ministro de Relaciones Exteriores del país, apoyó la reunión y dijo en Twitter que era “importante tanto para la seguridad de Israel como para su posición internacional.
“La seguridad y la coordinación civil con la Autoridad Palestina es esencial para la seguridad de Israel y está dirigida de manera responsable y profesional por el Ministro de Defensa”. Añadió.
Pero la reunión generó críticas de la oposición israelí, incluidos miembros del partido Likud del ex primer ministro Benjamin Netanyahu, el más grande del parlamento.
Hamas, el grupo militante que gobierna Gaza, también criticó la reunión, diciendo que dividió a los palestinos en un momento en que afirmó que había un aumento de los ataques de los colonos contra el pueblo palestino en la ocupada Cisjordania.
En los últimos meses se ha producido un aumento de la violencia de los colonos israelíes contra los palestinos en Cisjordania y los ataques palestinos contra israelíes en la Jerusalén oriental ocupada y Cisjordania.
En otro incidente, el ejército israelí dijo que un civil resultó herido por disparos desde la Franja de Gaza, el primer caso de violencia transfronteriza a lo largo de la frontera del enclave palestino en meses. El ejército dijo que respondió con fuego de tanques contra múltiples posiciones militantes de Hamas en la Franja de Gaza.
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