Johnny Depp se rodeó de un séquito de facilitadores para protegerle de las consecuencias de su consumo de drogas y alcohol, según declaró el jueves su ex esposa Amber Heard.
Heard volvió a subir al estrado para defenderse de las acusaciones de difamación de su ex marido.
Depp ha demandado a Heard por difamación por un artículo de opinión que escribió en The Washington Post en el que se describía como “una figura pública que representa el abuso doméstico”. Sus abogados dicen que fue difamado por el artículo de 2018 a pesar de que nunca mencionó su nombre.
Heard habló a los jurados sobre las fotos que tomó de Depp a partir de 2013 en las que estaba desmayado. Dijo que tomó las fotos porque Depp no podía recordar lo que había hecho cuando estaba borracho, y negó lo que había ocurrido mientras estaba desmayado.
“No se acordaba o lo negaba. No había nadie que me respaldara”, dijo.
Heard ha declarado que fue agredida física y sexualmente en múltiples ocasiones por Depp, normalmente cuando estaba borracho o drogado. Depp ha negado haberla golpeado, pero los abogados de Heard han dicho que sus negaciones carecen de credibilidad en parte porque no puede recordar lo que ha hecho cuando se desmaya.
Depp ha dicho que Heard exagera mucho su forma de beber y que tolera bien el alcohol. Amigos, familiares y empleados de Depp han subido al estrado y han respaldado su afirmación.
Pero Heard ha dicho que eso es parte del problema: ha dicho que Depp tiene un equipo a su alrededor que le limpia cuando se pone enfermo y le permite seguir con sus negocios sin reconocer las consecuencias de su bebida.
Se espera que Heard esté en el estrado todo el jueves en el Tribunal de Circuito del Condado de Fairfax.
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