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Hong Kong impondrá la realización de pruebas obligatorias de Covid a partir de mediados de marzo, ya que la ciudad lucha contra el peor brote del virus hasta la fecha y los hospitales se ven desbordados.
La líder Carrie Lam dijo que se aplicarán estrictas restricciones hasta mediados de abril, ya que la variante Omicron provoca un aumento “exponencial” de las infecciones que ha puesto a prueba el sistema sanitario.
Investigadores de la Universidad de Hong Kong predicen que los casos diarios en la ciudad podrían alcanzar en pocas semanas los 180.000, una cifra casi tan alta como la del Reino Unido, a pesar de tener sólo una décima parte de su población, 7,4 millones.
Hong Kong alberga algunos de los distritos más densamente poblados de la Tierra y la mayoría de los residentes viven en bloques de apartamentos de gran altura, en compañía de sus familiares y a menudo compartiendo estrechos ascensores.
Cada uno de los residentes de Hong Kong se someterá a tres pruebas en marzo, y la capacidad de pruebas diarias se incrementará a un millón.
La Sra. Lam dijo: “Los próximos uno a tres meses son cruciales para luchar contra la pandemia”.
Reiteró la estrategia de “cero Covid” de la ciudad, en línea con la China continental, con el objetivo de erradicar cualquier brote a cualquier precio. Agradeció repetidamente a las autoridades de la China continental su “apoyo incondicional”.
Las últimas medidas son las más draconianas aplicadas hasta ahora, tras dos años de tasas de infección relativamente bajas en el centro financiero mundial.
Se prohíben las reuniones de más de dos personas y se cierran la mayoría de los locales, incluidas las escuelas, los gimnasios y los salones de belleza, y se establece un toque de queda en los restaurantes a las 18:00 horas.
Se prohíben los vuelos desde nueve países, incluidos el Reino Unido y Estados Unidos. La Sra. Lam dijo que las medidas se han ampliado hasta el 20 de abril.
Y las vacaciones de verano de las escuelas, que imparten clases por Internet, se adelantarán a marzo-abril.
La Sra. Lam dijo que las autoridades no estaban considerando la posibilidad de un bloqueo en toda la ciudad, como los implementados en el continente.
Según los modelos elaborados por investigadores universitarios, no es probable que el curso de la actual ola cambie sin medidas estrictas de distanciamiento social, como el cierre.
Los contagios diarios se han multiplicado por 70 desde principios de febrero. Las autoridades sanitarias han informado de unos 5.000 nuevos contagios diarios desde el pasado martes, pero dijeron que un retraso en las pruebas significaba que no tenían la imagen completa.
La semana pasada, los hospitales estaban al 90% de su capacidad y las instalaciones de aislamiento estaban llenas.
La Sra. Lam reconoció el martes que las instalaciones de aislamiento de la ciudad eran “muy inadecuadas” y dijo que estaba trabajando con las autoridades centrales chinas para construir más.
Hong Kong ha registrado más de 60.000 casos, mucho menos que otras grandes ciudades similares. Sin embargo, una gran proporción de la vulnerable población de edad avanzada sigue sin vacunarse.
El gobierno pretende que el 90% de los residentes estén vacunados a principios de marzo, dijo la Sra. Lam, frente al 86% actual.
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