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La jueza Ketanji Brown Jackson ha puesto su fe religiosa en primer plano, en el centro, y de forma imprecisa.
Ha hablado mucho del papel de su fe en su vida y su carrera, pero no ha entrado en los detalles de ese compromiso. Sus creencias han llamado la atención mientras se somete a las audiencias del Comité Judicial del Senado esta semana para su nominación al Tribunal Supremo.
“También debo hacer una pausa para reafirmar mi agradecimiento a Dios, porque es la fe lo que me sostiene en este momento”, dijo Jackson al comité el lunes, en palabras similares a sus comentarios iniciales después de que el presidente Joe Biden la presentara el mes pasado como su candidata. “Incluso antes de hoy, puedo decir honestamente que mi vida ha sido bendecida sin medida”.
Jackson se identifica como protestante no confesional, dijo al comité el martes, cuando fue preguntada por el senador Lindsey Graham, republicano de Carolina del Sur.
Graham presionó, preguntando con qué frecuencia asiste a la iglesia. “En una escala del 1 al 10, ¿qué grado de fidelidad dirías que tienes en términos de religión?”.
Jackson contestó: “Soy reacia a hablar de mi fe de esta manera sólo porque quiero ser consciente de la necesidad de que el público confíe en mi capacidad para separar mis opiniones personales”. Dijo que su fe es importante, pero señaló que la Constitución prohíbe cualquier prueba religiosa para los cargos públicos.
Graham se mostró de acuerdo y admitió que podía ser imparcial, pero dijo que intentaba establecer una comparación con lo que consideraba un trato injusto de los demócratas a un candidato republicano. Preguntaron si las opiniones católicas de Amy Coney Barrett en 2017 -entonces en proceso de confirmación para el Tribunal de Apelaciones de Estados Unidos- influirían en sus decisiones sobre casos como la sentencia Roe v. Wade que legalizó el aborto. Barrett se incorporó al Tribunal Supremo en 2020.
En alusión al famoso intercambio de la senadora demócrata Dianne Feinstein con Barrett, Graham dijo: “¿Cómo te sentirías si un senador aquí arriba te dijera: “El dogma vive fuerte dentro de ti y eso es preocupante”?”
Si Jackson tiene una afiliación eclesiástica específica, no se pudo encontrar fácilmente en las búsquedas estándar de Google, ni a través de una búsqueda por palabras clave de las aproximadamente 2.000 páginas de documentos publicados por el Comité Judicial, que incluyen una gran franja del historial público de Jackson, como discursos y decisiones judiciales.
Jackson habla regularmente del poder motivador de la fe y la oración, ya sea en un discurso de graduación de la escuela secundaria o en un discurso sobre la profunda fe de los activistas de los derechos civiles. En un intercambio el martes con el senador demócrata Cory Booker, dijo: “A veces me centro en mi fe cuando estoy pasando por momentos difíciles”.
Pero el registro no da ninguna pista de si alguna vez perteneció a una congregación específica, si ha tenido algún papel de liderazgo en la iglesia o si asiste a los servicios regularmente.
Para la partidaria Barbara Williams-Skinner, nada de eso importa tanto como su vida pública.
“Ella dice que es una persona de fe fuerte, y lo hemos visto en acción”, dijo Williams-Skinner, co-convocante de la Red Nacional del Clero Afroamericano. Citó el trabajo de Jackson como defensora pública, haciendo una “elección para defender a los que no pueden defenderse por sí mismos”, y en la Comisión bipartidista de Sentencias de Estados Unidos.
“La gente que puede incluso no estar de acuerdo con ella en una serie de cuestiones cree que se apoyará en su fe para ser justa, para estar comprometida con la Constitución”, dijo Williams-Skinner.
Históricamente, la mayoría de los jueces han sido protestantes. Pero hoy en día, el tribunal cuenta con seis jueces católicos, uno protestante y dos judíos, aunque este último número se reducirá en uno cuando se haga efectiva la jubilación del juez Stephen Breyer. El único protestante, Neil Gorsuch, creció como católico, pero más recientemente ha asistido a servicios protestantes.
Jackson se ha enfrentado a algunos casos relacionados con la ley iglesia-estado, pero se ha negado a exponer una filosofía al respecto.
Cuando se enfrentó a las audiencias de confirmación del Senado para un puesto en el Tribunal de Apelaciones de EE.UU. para el Circuito del Distrito de Columbia en 2021, los senadores la acribillaron a preguntas sobre si estaba de acuerdo con las sentencias judiciales que anularon las restricciones estatales a la financiación de las instituciones religiosas o al culto público durante la pandemia.
En una respuesta escrita a los senadores, citó el “hecho indiscutible” de que la Constitución “protege un derecho fundamental y fundacional a la libertad religiosa”. Señaló que el Tribunal Supremo ha estado trabajando en las implicaciones de “lo que significa tratar a las organizaciones religiosas de forma diferente”, y dijo que se atendría a esos precedentes.
“No he expresado ninguna opinión personal sobre el alcance y los contornos del derecho fundamental a la libertad religiosa, y no seríaapropiado que lo haga”, dijo.
Esa respuesta podría haber sido suficiente para un puesto de nivel de apelación, pero los senadores necesitan presionar para obtener más respuestas sobre su filosofía, dijo Roger Severino, un miembro senior del Centro de Ética y Política Pública y ex director de la Oficina de Derechos Civiles en el Departamento de Salud y Servicios Humanos durante la administración Trump.
Severino dijo que los senadores deberían preguntarle su filosofía judicial en asuntos como cuando los reclamos de libertad religiosa chocan con las acciones del gobierno.
“Ella dio los tópicos”, dijo Severino. “Nadie va a salir a decir: ‘Estoy en contra de la libertad religiosa’. Pero aquí está la cosa: cuando ella está en la Corte Suprema, ya no tiene el deber de seguir los precedentes de la Corte Suprema. Ella podría anular el precedente de la Corte Suprema”.
Jackson ya formó parte del consejo de la Montrose Christian School, una escuela privada de Maryland afiliada a una iglesia baptista del sur. La declaración de creencias de esa escuela se hacía eco de las posturas doctrinales de la denominación contra el matrimonio entre personas del mismo sexo y el aborto, y afirmaba que una esposa debía “someterse con gracia” al liderazgo de su marido.
Preguntada por este papel en 2021 durante su audiencia de apelación, dijo que no conocía la declaración y que no “está necesariamente de acuerdo con todas las declaraciones” de las juntas en las que participa.
Severino contrastó la respuesta de Jackson con la forma en que Barrett fue criticada por afiliarse a una escuela cristiana con creencias similares. “Como se trata de uno de los suyos, la izquierda le da un pase (a Jackson)”.
Rachel Laser, directora general de Americans United for Separation of Church and State, dijo que no tenía ningún problema con que Jackson destacara su fe en Dios.
“Cuando alguien está en un momento vital clave, es apropiado que sea auténtico sobre quién es”, dijo Laser, señalando que Biden cita a menudo su fe católica públicamente.
“Mientras estas personas apoyen la separación Iglesia-Estado en su capacidad oficial y sean conscientes de que se dirigen a un público diverso que puede no compartir sus creencias, está perfectamente bien que sean auténticos”, dijo.
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El periodista de Associated Press Mark Sherman en Washington contribuyó a este informe.
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La cobertura religiosa de Associated Press recibe apoyo a través de la colaboración de AP con The Conversation US, con financiación de Lilly Endowment Inc. La AP es la única responsable de este contenido.
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