Joe Arpaio pierde el tercer intento de remontada en la carrera por la alcaldía

Joe Arpaio, el ex sheriff de Arizona de 90 años de edad que fue una figura poderosa en la política republicana, pero que fue destituido hace casi seis años en medio de la frustración por sus tácticas de acaparamiento de titulares y sus problemas legales, fue derrotado el miércoles en una carrera por la alcaldía del afluente suburbio donde ha vivido durante más de dos décadas.

Su derrota en la carrera por la alcaldía de Fountain Hills contra la titular de dos mandatos, Ginny Dickey, marca el tercer intento fallido de regreso de Arpaio desde su pérdida en 2016 después de servir 24 años como sheriff del condado de Maricopa.

A pesar de que los funcionarios electorales dicen que todos los votos en el condado de Maricopa han sido contados, Arpaio dijo el miércoles por la noche que no estaba concediendo la carrera y en su lugar iba a consultar con un abogado para explorar si impugna los resultados.

“No estoy diciendo que voy a hacerlo”, dijo Arpaio sobre una impugnación legal. “No soy un abogado. Sólo quiero un poco de información. En el ambiente actual, un gran porcentaje de la gente no está contenta con la forma en que el sistema (electoral) estaba funcionando.”

Dickey no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.

Lo que está en juego en Fountain Hills, un pueblo de 24.000 habitantes con predominio de republicanos, es mucho menos importante para Arpaio que cuando se desempeñaba como máximo responsable de la aplicación de la ley en un condado de más de 4 millones de habitantes.

Arpaio fue aplastado por un contrincante demócrata en 2016 y fue condenado al año siguiente por desacato penal por desobedecer la orden de un juez de detener las patrullas de tráfico que apuntaban a los inmigrantes, aunque luego fue indultado por el entonces presidente Donald Trump.

Arpaio quedó entonces tercero en unas primarias republicanas para un escaño en el Senado de Estados Unidos en 2018 y segundo en las primarias del Partido Republicano en un intento por recuperar el puesto de sheriff en 2020.

En sus dos primeros intentos de regreso, Arpaio perdió la votación en Fountain Hills.

Arpaio, un hábil recaudador de fondos políticos que gastó más de 12 millones de dólares en su campaña de sheriff de 2016, ha desembolsado 161.000 dólares en la carrera por la alcaldía, seis veces la cantidad gastada por Dickey.

Antes de que el gobierno federal y los tribunales le quitaran sus poderes en materia de inmigración, Arpaio dirigió 20 patrullas de tráfico a gran escala que tenían como objetivo a los inmigrantes y más de 80 redadas en negocios para detener a personas que trabajaban en Estados Unidos sin permiso.

Aunque su actitud desafiante fue bien recibida por los votantes durante muchos años, Arpaio se enfrentó a fuertes críticas por adoptar políticas que sabía que eran controvertidas y por acumular 147 millones de dólares en facturas legales financiadas por los contribuyentes.

Aunque se autoproclamó el sheriff más duro de Estados Unidos, su agencia chapurreó las investigaciones de más de 400 denuncias de delitos sexuales presentadas en su oficina.