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La Marina Real Tailandesa ha confirmado la muerte de al menos seis infantes de marina después de que un buque de guerra volcara frente a la costa del sur de Tailandia debido al mal tiempo.
El HTMS Sukhothai -una corbeta de fabricación estadounidense con 105 miembros a bordo- se hundió a 37 km de la costa de la provincia de Prachuap Khiri Khan el domingo por la noche. Setenta y cinco personas fueron rescatadas el lunes, según informó la marina en un tuit.
El ejército tailandés movilizó dos helicópteros Seahawk, el buque de guerra HTMS Kraburi y aviones no tripulados frente a su costa central para rastrear las agitadas aguas en una carrera contrarreloj para encontrar supervivientes.
El almirante Choengchai Chomchoengpaet, comandante de la Armada, declaró el martes en una rueda de prensa que se habían recuperado cuatro cadáveres a casi 60 km del barco hundido. Los militares anunciaron más tarde que se había encontrado otro cadáver y que uno de los dos rescatados había sucumbido.
Veintitrés personas seguían en paradero desconocido, algunas sin chalecos salvavidas.
Cinco cadáveres fueron trasladados en helicóptero a la Fundación Sawangrat Sattha Thammasathan, en la provincia de Prachuap, para su identificación, mientras que el otro permanecía en el buque HTMS Bhumibol Adulyadej, según informó la Marina en una actualización el martes por la noche.
“Me gustaría pedir disculpas a las familias de los fallecidos”, dijo el almirante.
El almirante Chonlathis Navanugraha, jefe del Estado Mayor de la Armada, dijo que la última persona fue encontrada 41 horas después del hundimiento del barco y que estaba viva.
“Así que creemos que aún hay personas con vida ahí fuera… seguiremos buscando”.
Uno de los marines fue encontrado a última hora del lunes aferrado a una boya, dijo el capitán Kraipich Korawee-Paparwit, comandante del HTMS Kraburi.
“Estuvo flotando en el agua durante 10 horas. Todavía estaba consciente, así que pudimos sacarlo del agua sin peligro”.
El vicealmirante Pichai Lorchusakul, comandante de la marina regional, dijo que encontrar a los desaparecidos sería crítico dado el tiempo que estuvieron expuestos a los elementos. Anteriormente, declaró que la principal prioridad era buscar y rescatar “a tantos como podamos”.
El buque de guerra Sukhothai, que estaba patrullando, sufrió una avería en el motor y empezó a hacer agua poco antes de la medianoche del domingo. Los fuertes vientos y las olas de más de cuatro metros arrojaron agua de mar sobre la corbeta, golpeando su sistema eléctrico, y la pérdida de energía permitió que entrara más agua en el buque, provocando su escora y hundimiento.
Los socorristas sufrieron un revés el lunes, ya que los fuertes vientos siguieron dificultando las labores de rescate.
El comandante del HTMS Kraburi, Kraiwit Kornraweeprapapitch, dijo que una ligera mejora del tiempo ayudaría a la búsqueda.
“El formato de búsqueda sigue siendo el mismo, que es una operación conjunta con helicópteros”, dijo, y agregó que los buques están escaneando un área de aproximadamente 50 km por 50 km.
El capitán del barco hundido, el teniente coronel Pichitchai Tuannadee, dijo que estuvo en el mar durante dos horas antes de subir a una balsa y ser encontrado por los equipos de búsqueda el lunes.
“Para ver algo tan pequeño como un aro salvavidas o la cabeza de una persona por encima de la superficie del agua, es muy difícil de ver con las grandes olas”, dijo.
Añadió que era probable que los marineros desaparecidos estuvieran ya fatigados por tener que pisar el agua y asegurarse de que los que no llevaban chaleco se mantenían a flote.
El ahogamiento del buque es un golpe importante para la marina tailandesa, que sólo contaba con siete corbetas. La fuerza sólo cuenta con dos corbetas de la clase Ratanakosin construidas en EE.UU. por Tacoma Boatbuilding Company en la década de 1980.
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