El fiscal jefe de la Corte Penal Internacional dijo el lunes que no iniciará una investigación completa sobre las acusaciones de que el ex presidente boliviano Evo Morales y sus partidarios cometieron crímenes de lesa humanidad al establecer retenes que impidieron a la población de una de las naciones más pobres de América Latina acceder a la atención sanitaria vital durante la pandemia de coronavirus.
Bolivia pidió a la corte mundial en 2020 que abriera una investigación sobre los bloqueos de carreteras, alegando que Morales y otros llevaron a cabo “ataques sistemáticos y organizados contra la población boliviana” para impedirles el acceso a suministros y servicios sanitarios.
La solicitud boliviana decía que los bloqueos tuvieron “como consecuencia directa la muerte de varias personas y la angustia en el resto de la población” ante la posibilidad de no poder acceder a suministros y atención médica.
En el escrito se argumentaba que la campaña constituía los crímenes de lesa humanidad de asesinato y actos inhumanos.
Sin embargo, el fiscal de la CPI, Karim Khan, dijo el lunes que una investigación preliminar estableció que los hechos no cumplían los criterios legales de los crímenes contra la humanidad según el tratado fundacional de la corte, el Estatuto de Roma.
“De acuerdo con mi mandato, mi función no es juzgar el contexto político en el que se produjeron los supuestos incidentes, sino determinar -mediante una evaluación independiente, imparcial y objetiva- si constituyen crímenes del Estatuto de Roma”, dijo Khan.
“He llegado a la conclusión de que no lo son”, añadió.
Las autoridades bolivianas podrían solicitar una revisión judicial de la decisión de Khan.
Morales, el primer presidente indígena del país, renunció en 2019 bajo la presión de los militares y la policía en medio de protestas y disturbios generalizados que alegaban que intentaba reclamar la reelección de forma fraudulenta. Se exilió, primero en México y después en Argentina.
Regresó a Bolivia a finales de 2020 después de que un protegido, el ex ministro de Economía Luis Arce, jurara como presidente tras ganar las elecciones con el 55% de los votos nacionales. El partido Movimiento al Socialismo de Morales también conservó su mayoría en el Congreso.
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