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La deforestación de la Amazonia se disparó a niveles récord el mes pasado, según nuevos y alarmantes datos del gobierno brasileño.
La cantidad de bosque eliminado aumentó casi el doble en comparación con el mes de abril del año pasado, mostró.
Los defensores del medio ambiente afirmaron que la deforestación se ha “institucionalizado” en el país, que contiene gran parte de la mayor selva tropical del mundo, y señalaron al presidente de Brasil como responsable de los niveles récord.
La deforestación en la Amazonia brasileña ascendió a 1.012,5 kilómetros cuadrados en todo el mes de abril, excepto en el último, según los datos de la agencia nacional de investigación espacial Inpe, que ha estado informando de los recuentos mensuales desde 2015/2016.
Los datos correspondientes al 30 de abril se publicarán la próxima semana. Pero las cifras ya muestran que la deforestación está en el nivel más alto registrado para abril.
Llega después de que también se batieran récords en enero y febrero de este año.
“La cifra de abril da mucho miedo. Debido a la lluvia, es tradicionalmente un mes con menos deforestación”, dijo Suely Araujo, del Observatorio del Clima.
Marcio Astrini, director del mismo grupo brasileño de defensa del medio ambiente, dijo: “La causa de este récord tiene nombre y apellido: Jair Messias Bolsonaro”.
La deforestación en la Amazonia se ha acelerado desde que el presidente derechista asumió el poder hace tres años y debilitó la protección del medio ambiente.
Sostiene que una mayor explotación agrícola y minera en la selva -que es un importante sumidero de carbono y una de las zonas más ricas en biodiversidad del planeta- ayudará a reducir la pobreza.
Pero la Amazonia es una de las zonas más ricas en biodiversidad del planeta, así como un enorme sumidero de carbono que se considera clave para luchar contra la crisis climática.
Los árboles, especialmente en los bosques antiguos, desempeñan un papel importante en la eliminación de la atmósfera del dióxido de carbono que calienta el planeta.
Bill McGuire, profesor de riesgos climáticos del University College de Londres, dijo que el nivel de deforestación en la Amazonia brasileña el mes pasado era una “noticia espantosa”.
“Decir que la echaremos de menos cuando desaparezca, es como decir que echaremos de menos nuestros pulmones cuando desaparezcan”, tuiteó.
Ane Alencar, directora científica del Instituto de Investigación Ambiental de la Amazonia (IPAM), dijo que la cantidad de selva tropical talada era “absurda”.
“Parece que la tala de bosques se ha institucionalizado en el país como algo común, con récord tras récord”, dijo.
Los investigadores también han descubierto que la selva amazónica está perdiendo su capacidad para recuperarse de eventos extremos, lo que hace temer que se esté acercando a un “punto de inflexión”.
Los científicos temen que esto pueda desencadenar una muerte masiva de árboles y que la selva se convierta en una sabana.
El gobierno brasileño dijo que estaba haciendo grandes esfuerzos para luchar contra los delitos ambientales y que las autoridades estaban cooperando para combatir la deforestación en cinco estados de la Amazonia.
Informes adicionales de las agencias
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