El índice de aprobación del presidente Joe Biden alcanzó este lunes un nuevo mínimo y tocó el 39,7%, peor que el de su predecesor Donald Trump a estas alturas de 2018, según un nuevo sondeo.
El sondeo realizado por fivethirytyeight ha revelado que, tras 510 días en el cargo, el presidente se enfrenta a un índice de desaprobación del 53,7%.
En comparación, en el día 510 de su presidencia en 2018, el Sr. Trump tenía un índice de aprobación del 41,8 por ciento y un índice de desaprobación del 51,7 por ciento.
El ex presidente Barack Obama, por su parte, tenía un índice de aprobación del 47,6 por ciento y un índice de siprobación del 45,5 por ciento en el mismo momento de su presidencia, reveló la encuesta.
Los índices de aprobación de los presidentes pueden ayudar a entender cómo se siente el público sobre el partido gobernante en Washington DC.
El Sr. Biden tiene la oportunidad de mejorar su posición antes de las elecciones de mitad de período que se celebrarán en noviembre.
Estas tendencias sugieren que los votantes, en la mayoría de los casos, han tomado una decisión en febrero, informó Axios. Así pues, acontecimientos tardíos como el proyecto de sentencia del Tribunal Supremo sobre la anulación de Roe contra Wade o las audiencias en curso de la comisión del 6 de enero pueden no influir en los votantes.
El mes pasado, el índice de aprobación del presidente cayó al punto más bajo de su presidencia, con sólo el 39% de los adultos aprobando su actuación, según el Centro de Investigación Pública de The Associated Press-NORC.
El presidente lleva meses enfrentándose a unos índices de aprobación cada vez más bajos, y en su círculo íntimo ha crecido el temor a que su mandato acabe siendo como el de Jimmy Carter, el último presidente demócrata que sólo estuvo en el cargo durante un único mandato.
Los bajos índices de aprobación del Sr. Biden parecen haber hecho que el presidente y sus ayudantes se sientan “limitados o impotentes” para “combatir las fuerzas que les golpean”, que incluyen la inflación, el aumento de los precios de la gasolina y el gasóleo, una racha de tiroteos masivos que el Congreso parece no estar dispuesto a abordar, y la continua guerra de Rusia en Ucrania, según Político.
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