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La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) ha anunciado que los audífonos se podrán adquirir pronto sin receta médica, en lo que supone el último paso para que estos dispositivos sean más accesibles y asequibles.
La medida fue celebrada por el gobierno de Biden como una victoria en la agenda, ya que el presidente se había presentado con una plataforma para ampliar el acceso a la atención sanitaria de alta calidad y reducir los costes para el público estadounidense.
“A partir de mediados de octubre, los estadounidenses podrán comprar audífonos más asequibles sin receta en farmacias y tiendas de todo el país”, dijo Joe Biden dijo en un comunicado publicada por la Casa Blanca el martes.
“Cuando son muy pocas las empresas que dominan, los consumidores estadounidenses pagan costes más elevados. Por fin estamos construyendo una economía que funcione para las familias trabajadoras”, añadió, señalando cómo la nueva norma ayuda a cumplir otro de los objetivos de su administración de actuar en la diversificación de la economía para hacer bajar los precios de dispositivos y tratamientos médicos muy solicitados.
James Kennedy, un profesional del teatro afincado en Nueva York, celebró la noticia como un cambio de vida.
La medida creará una nueva categoría de audífonos de venta libre (OTC), a la que podrán acceder las personas con deficiencias auditivas de leves a moderadas para adquirir los dispositivos en tiendas físicas o a través de proveedores en línea sin el requisito previo de un examen médico o una receta médica, según informó la agencia federal en un comunicado de prensa.
Reducir el precio de los audífonos, que según la FDA son utilizados por casi 30 millones de estadounidenses, sería un logro importante para la administración Biden. Entre el propio dispositivo y los servicios de adaptación, a veces pueden costar a los estadounidenses más de 5.000 dólares.
El precio de venta al público no es el único obstáculo para los consumidores, ya que la cobertura de los seguros para los dispositivos sigue siendo bastante limitada y Medicare, el programa nacional de seguros de salud del gobierno estadounidense, sólo cubre las pruebas para los dispositivos, no los audífonos en sí.
“La reducción de los costes de la atención sanitaria en Estados Unidos ha sido una de mis prioridades desde el primer día y se espera que esta norma nos ayude a conseguir un acceso a la atención sanitaria de calidad y asequible para millones de estadounidenses que lo necesitan”, declaró el secretario de Salud y Servicios Humanos, Xavier Becerra, en el comunicado. “La acción de hoy de la FDA representa un hito importante para que los audífonos sean más rentables y accesibles”.
La finalización de la norma para conseguir el acceso a los audífonos sin receta en Estados Unidos llega después de que el presidente Biden emitiera el año pasado una orden ejecutiva para promover la competencia en la economía, que incluía un plazo de 120 días para que la FDA tomara medidas para permitir la venta de audífonos sin receta.
También llega después de que se aprobara una legislación bipartidista en 2017, que también exigía a la agencia federal crear una categoría específica para los dispositivos de venta libre. Sin embargo, eso recién se implementó con la reciente norma.
“Establecer esta nueva categoría regulatoria permitirá a las personas con pérdida auditiva percibida de leve a moderada tener un acceso conveniente a una serie de audífonos seguros, efectivos y asequibles en la tienda de su vecindario o en línea”, dijo el comisionado de la FDA, Robert M Califf, en el comunicado.
Sin embargo, para las personas afectadas por una pérdida de audición más grave, esta nueva norma no se aplicará a sus dispositivos, ya que éstos seguirán necesitando una prescripción.
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