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Imágenes estremecedoras tomadas desde toda Ucrania muestran la cruda realidad de la invasión de Ucrania por parte del presidente Vladimir Putin.
Seis días después de que el presidente ruso ordenara a las tropas marchar hacia la vecina Ucrania, el conflicto sigue vigente, a pesar del breve alto el fuego que tuvo lugar el lunes durante las conversaciones entre funcionarios rusos y ucranianos.
Los bombardeos continuaron el martes con víctimas civiles masivas tras una enorme explosión en Kharkiv.
Un misil impactó el lunes por la mañana en la Plaza de la Libertad de la ciudad, justo delante de las oficinas de la administración regional, un ataque que fue denunciado como un “crimen de guerra traicionero” por el jefe de la administración regional, Oleh Synehubov.
Kharkiv está situada en el este de Ucrania y es la segunda ciudad más grande del país. Alberga algunas de las industrias más importantes del país e incluye múltiples empresas de TI y una fábrica de tanques.
El presidente ucraniano Zelensky ha condenado los bombardeos como un crimen de guerra y ha dicho que Rusia está atacando deliberadamente a los civiles.
La guerra, que estalló el 24 de febrero, ya se ha cobrado cientos de vidas y ha herido a muchas más.
Miles de ucranianos se han quedado y han tomado las armas para ayudar a defender su país, y ucranianos de todo el mundo han vuelto para luchar.
Mientras tanto, más de 660.000 personas, en su mayoría mujeres y niños, han huido de Ucrania a los países vecinos en los últimos seis días, dijo el martes la agencia de refugiados de las Naciones Unidas.
Shabia Mantoo, portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), dijo en una sesión informativa en Ginebra que se había informado de personas que esperaban hasta 60 horas para entrar en Polonia, mientras que las colas en la frontera rumana eran de hasta 20 kilómetros.
La Unión Europea (UE) calcula que hasta cuatro millones de personas pueden intentar salir del país y ha relajado sus normas de acogida de refugiados y dice que los Estados miembros de la UE recibirán a los refugiados ucranianos con los “brazos abiertos”.
El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, se vio sometido el lunes a una creciente presión para que haga más por ayudar a los que huyen del conflicto, después de que su gobierno dijera que sólo los ucranianos con familia en el Reino Unido podrán viajar allí sin visado.
La ministra del Interior, Priti Patel, ha rechazado las demandas de ofrecer una exención total de visado a los ucranianos que huyen de la guerra, pero el lunes por la noche dijo que ampliar el plan de visados era algo en lo que los ministros estaban “absolutamente trabajando.”
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