La madre de Breonna Taylor, que recibió un disparo mortal de la policía en su apartamento durante una redada fallida en Louisville, Kentucky, fue “expulsada y escoltada” de la sala del tribunal durante un juicio relacionado con un agente implicado en el incidente mortal.
Al parecer, Tamika Palmer recibió instrucciones de abandonar el tribunal el 25 de febrero durante el juicio penal del ex detective de la policía metropolitana de Louisville, Brett Hankison, después de que se presentara con una chaqueta de letterman con una gran “B” y una imagen de la cara de su hija.
La chaqueta también incluía la fecha de la redada, cuando tres agentes con una orden de no llamar entraron en el apartamento de Taylor buscando a dos personas sospechosas de vender drogas. Los agentes dispararon más de 20 veces en el apartamento.
Según un post de Instagram de la hermana menor de Taylor, Juniyah Palmer, un funcionario judicial le dijo a su madre que su chaqueta no “iba a funcionar” y que violaba una código de vestimenta de la sala según el cual “nadie debe llevar ningún atuendo ni mostrar ningún objeto que sea tan intrínsecamente perjudicial que pueda privar al acusado de un juicio justo”.
Al parecer, fueron escoltados fuera del juzgado.
Juniyah Palmer también dijo que fue expulsada de la sala del tribunal el jueves por llevar un jersey con la imagen de su hermana y la frase “arresten a los policías que mataron a Breonna Taylor”, que se ha convertido en un grito de guerra en las protestas internacionales por la justicia racial y en las manifestaciones contra la violencia policial impulsadas a raíz de su muerte.
Hankison realizó 10 disparos cerca de una puerta lateral durante la redada, hace casi dos años, aunque ninguno de sus disparos alcanzó a Taylor, una mujer negra de 26 años y trabajadora médica. Los fiscales sostienen que sus disparos pusieron en peligro a sus vecinos, entre ellos una pareja y su hijo.
Se le acusa de tres cargos de peligro gratuito, castigados con hasta cinco años de prisión si se le declara culpable. Se ha declarado inocente.
Durante la redada, el novio de Taylor, Kenneth Walker, disparó una ronda de su arma de fuego de propiedad legal después de que los agentes utilizaran un ariete para entrar en el apartamento. Golpeó al sargento Jonathan Mattingly en el muslo, alcanzando su arteria femoral.
Los agentes devolvieron el fuego. Myles Cosgrove hizo el disparo que mató a Taylor, según el FBI.
Hankinson fue el único oficial acusado en el tiroteo; nadie ha sido acusado por la muerte de Taylor.
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