Los partidos de la oposición en Serbia y los grupos internacionales de derechos denunciaron el domingo la decisión del presidente populista Aleksandar Vucic de cancelar el evento paneuropeo LGBTQ EuroPride del próximo mes, debido a lo que dijo eran amenazas de extremistas de derecha.
La mayoría de los grupos dijeron que ignorarían la prohibición anunciada el sábado por Vucic y seguirían adelante con los eventos programados del 12 al 18 de septiembre en la capital, Belgrado.
Vucic dijo que la crisis política con la antigua provincia escindida de Serbia, Kosovo, que declaró su independencia en 2008, y los problemas económicos que afronta el país en medio de la guerra de Rusia en Ucrania eran algunas de las razones por las que las autoridades de la nación balcánica no podían gestionar el EuroPride.
La oficina de la ONU en Serbia se mostró preocupada por la anunciada prohibición, diciendo que pondría en peligro “el derecho a la libertad de reunión garantizado por la Constitución serbia”.
“El EuroPride es también una oportunidad para celebrar los fundamentos de una sociedad fuerte y progresista basada en la equidad social, la igualdad de todos los derechos, la solidaridad, la amistad y el amor”, dijo la coordinadora residente de la ONU en Serbia, Francoise Jacob.
Los miembros de la Asociación Europea de Organizadores del Orgullo eligieron la capital de Serbia hace tres años para celebrar el evento anual, con la esperanza de que representara un gran avance para un país eslavo tradicionalmente conservador y bajo una fuerte influencia de la Iglesia Ortodoxa.
Serbia busca formalmente la adhesión a la Unión Europea, pero lleva años acercándose a la órbita política de Rusia. El país balcánico ha votado a favor de las resoluciones de la ONU que condenan la invasión rusa de Ucrania, pero se ha negado a sumarse a las sanciones occidentales contra Moscú.
En una protesta convocada antes de la cancelación del evento del orgullo, miles de simpatizantes de la iglesia de derecha marcharon por la capital serbia el domingo por la noche en una procesión que dijeron era “para salvar a Serbia”. Estaban liderados por la rama serbia de los Lobos Nocturnos, el grupo de moteros ruso considerado cercano al presidente ruso Vladimir Putin.
El partido de la oposición Foro Cívico Democrático acusó al presidente serbio de “jugar a ser un dictador” al parecerse a Putin, y de intentar prohibir el evento del orgullo de Belgrado.
El líder de Democracia Cívica, Zoran Vuletic, dijo en un comunicado que el partido quería recordar a Vucic “que no puede cancelar un evento que no ha programado y que no puede, según la Constitución, prohibir la reunión de personas.”
Vucic anunció el sábado la decisión de cancelar la celebración del EuroPride durante una rueda de prensa en la que también propuso ampliar el mandato de la primera ministra de Serbia, Ana Brnabic, que es lesbiana.
Brnabic ha sido acusada con frecuencia por los grupos de derechos de los homosexuales de Serbia de no haber hecho nada para ayudar a su situación en Serbia durante sus dos primeros mandatos en el gobierno. Se unió a Vucic para apoyar la cancelación del evento EuroPride.
“Se mire como se mire, desde cualquier ángulo que se mire, lo primero inviolable es garantizar la paz y la estabilidad en el país”, dijo Brnabic.
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