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Una fuerza de mantenimiento de la paz de la OTAN ha dicho que está “preparada para intervenir” en medio de las crecientes tensiones entre Kosovo y Serbia.
El compromiso se produce cuando la policía de Kosovo dijo que había cerrado dos pasos fronterizos en el inestable norte después de que los serbios locales bloquearan las carreteras y dispararan contra la policía en señal de protesta. La población local se enfureció por la orden de cambiar las matrículas de los coches serbios por las kosovares en un plazo de dos meses, lo que desató las protestas.
La Fuerza de la OTAN en Kosovo (KFOR) dijo en un comunicado: “La misión de la KFOR, dirigida por la OTAN, está vigilando de cerca y está preparada para intervenir si se pone en peligro la estabilidad, de acuerdo con su mandato, derivado de la Resolución 1244 de 1999 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. La KFOR tomará todas las medidas necesarias para mantener un entorno seguro en Kosovo en todo momento, de acuerdo con su mandato de la ONU.”
Catorce años después de que Kosovo declarara su independencia de Serbia, unos 50.000 serbios que viven en el norte utilizan matrículas y documentos emitidos por las autoridades serbias, negándose a reconocer las instituciones de la capital, Pristina. Kosovo ha sido reconocido como Estado independiente por más de 100 países, pero no por Serbia o Rusia.
El gobierno del primer ministro Albin Kurti dijo que daría a los serbios un periodo transitorio de 60 días, a partir del 1 de agosto, para obtener matrículas de Kosovo, un año después de renunciar a imponerlas debido a protestas similares.
El gobierno añadió que, a partir del 1 de agosto, todos los ciudadanos de Serbia que visiten Kosovo tendrán que obtener un documento adicional en la frontera que les permita entrar. Las autoridades de Belgrado aplican una norma similar a los kosovares que visitan Serbia.
Los manifestantes aparcaron camiones llenos de grava y otra maquinaria pesada en las carreteras que llevan a los dos pasos fronterizos, Jarinje y Bernjak, en un territorio donde los serbios son mayoría. Como consecuencia, la policía de Kosovo dijo que tuvo que cerrar los pasos fronterizos. “Pedimos a todos los ciudadanos que utilicen otros pasos fronterizos”, dijo la policía en su página de Facebook.
La policía dijo que hubo disparos “en dirección a las unidades policiales, pero afortunadamente nadie resultó herido”. La policía también afirmó que los manifestantes enfurecidos golpearon a varios albaneses que pasaban por las carreteras que habían sido bloqueadas y que algunos coches habían sido atacados.
Las sirenas de ataque aéreo se escucharon durante más de tres horas en la pequeña ciudad de Mitrovica Norte, habitada principalmente por serbios. Hace un año, después de que los serbios locales bloquearan las mismas carreteras por culpa de las matrículas, el gobierno de Kosovo desplegó fuerzas policiales especiales y Belgrado hizo volar aviones de combate cerca de la frontera.
Las tensiones entre los dos países están ahora en su punto más alto en años y la frágil paz de Kosovo es mantenida por una misión de la OTAN que cuenta con 3.770 efectivos sobre el terreno. Las fuerzas de paz italianas también fueron visibles en Mitrovica y sus alrededores el domingo.
Los dos países se comprometieron en 2013 a entablar un diálogo auspiciado por la Unión Europea para tratar de resolver las cuestiones pendientes, pero apenas se ha avanzado.
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