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Ivana Trump, icono del estilo, la riqueza y los excesos de los años 80 y empresaria que ayudó a su marido a construir un imperio que le lanzó a la presidencia, será celebrada en una misa funeral en Nueva York el miércoles tras su muerte la semana pasada.
Se espera que los tres hijos de Ivana con el ex presidente Donald Trump -Donald Jr., Ivanka y Eric- asistan a la reunión del miércoles por la tarde en la iglesia católica romana de San Vicente Ferrer, en el Upper East Side de Manhattan. No estaba claro si el ex presidente se uniría a ellos.
La familia de Trump anunció el jueves que la mujer de 73 años había muerto en su casa de Manhattan. Las autoridades dijeron que la muerte fue un accidente, con lesiones por impacto contundente en su torso como causa.
“Todos queremos recordar a Ivana como la persona vibrante y sociable que era”, dijo R. Couri Hay, un viejo amigo de Trump que planeaba asistir al servicio.
Ivana y Donald Trump se conocieron en los años 70 y estuvieron casados de 1977 a 1992. En la década de 1980, fueron una pareja poderosa, y ella se hizo muy conocida por derecho propio, reconocible al instante con su pelo rubio recogido y su look glamuroso.
Ivana Trump también participó en los negocios de su marido, gestionando uno de sus casinos de Atlantic City y eligiendo algunos de los elementos de diseño de la Torre Trump de Nueva York.
Su divorcio, muy público, fue feo, pero en los últimos años se mostraron amistosos. Ivana Trump un entusiasta partidario de la campaña presidencial de Donald Trump en 2016, y dijo que hablaban con regularidad.
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