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Las hermanas Lila Ammouri y Susan Frazier, que murieron por suicidio asistido en Suiza, gozaban de buena salud y eran felices antes de su muerte, dice su hermano.
Dice que los servicios consulares de EE.UU. le ocultaron la causa de la muerte.
Lila Ammouri, de 54 años, médico de cuidados paliativos, y la señora Frazier, de 49 años, enfermera titulada, volaron de Arizona a Suiza vía Chicago el 3 de febrero sin avisar a sus amigos o familiares.
Cuando no se presentaron a trabajar en Aetna Health Insurance el 15 de febrero, sus colegas dieron la voz de alarma, temiendo que pudieran haber sido secuestradas o tomadas como rehenes.
Su muerte fue confirmada por el Consulado de Estados Unidos en Suiza el 18 de febrero.
El Sr. Ammouri, que vive en la ciudad de Nueva York, dijo que todavía estaba asimilando la pérdida de sus dos hermanas, que eran su única familia viva.
“Nunca lo voy a superar”, dijo. “Todavía estoy conmocionado, ahora estoy solo. Ahora soy hijo único”.
Dijo que sus hermanas eran adoradas por todos los que las conocían.
“Eran realmente especiales. Nunca hacían daño a nadie. Siempre ayudaban a todo el mundo. Se desvivían por ayudar a la gente, lo cual es raro.
“Lamentablemente es una tragedia, francamente”.
El suicidio asistido es legal en Suiza “bajo ciertas condiciones”, según las autoridades.
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