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Los fuertes vientos y el tiempo caluroso y seco están frustrando los esfuerzos de los bomberos franceses por contener un enorme incendio forestal que recorrió el sábado los bosques de pinos de la región de Burdeos por quinto día consecutivo, uno de los varios que han abrasado Europa en los últimos días.
Uno de los peores incendios se ha producido en Portugal, donde el piloto de un avión de extinción de incendios murió el viernes al estrellarse su aparato mientras realizaba una operación en el noreste del país. Se trata de la primera víctima mortal en los incendios de Portugal en lo que va de año, que han causado más de 160 heridos y han obligado a evacuar a cientos de personas de las ciudades esta semana.
La temporada de incendios ha llegado a partes de Europa antes de lo habitual este año, tras una primavera inusualmente seca y calurosa que las autoridades atribuyen al cambio climático.
Unos 3.000 bomberos, apoyados por aviones de bombeo de agua, están luchando contra las llamas en el sur de Francia, dijo el presidente, y Grecia envió equipos de extinción de incendios para ayudar. Más de 11.000 personas han sido evacuadas de pueblos y campings.
Los bomberos lograron contener uno de los peores incendios durante la noche, cerca de la localidad costera atlántica de Arcachon que es popular entre los turistas de toda Europa, dijo el sábado el servicio de emergencia regional.
Pero dijo que las “duras condiciones meteorológicas” frustraron los esfuerzos para contener el mayor incendio de la región, que comenzó en la ciudad de Landiras, al sur de un valle de viñedos de Burdeos. Están centrando sus esfuerzos el sábado en utilizar camiones de bomberos para rodear los pueblos en riesgo y salvar el mayor número posible de casas, dijo Charles Lafourcade, que supervisa la operación de extinción de incendios, a los periodistas en el lugar.
Los dos incendios han quemado al menos 9.650 hectáreas en los últimos días.
Una escena similar se vive en Portugal, donde más de 3.000 bomberos luchan junto a ciudadanos portugueses desesperados por salvar sus hogares de varios incendios forestales que arrasan el país, avivados por las temperaturas extremas y las condiciones de sequía. La Agencia de Protección Civil del país dijo que 10 incendios seguían arrasando el viernes.
La televisión estatal portuguesa RTP informó el viernes de que la superficie quemada este año ya ha superado el total de 2021. Más de 30.000 hectáreas (74.000 acres) de tierra se han quemado, dijo, la mayoría en la última semana.
España, Croacia y Hungría también han luchado contra los incendios forestales esta semana, al igual que California y Marruecos. Muchos países europeos se enfrentan este mes a un calor excepcional que también se atribuye al cambio climático.
Las autoridades portuguesas indicaron que el miércoles se registró una máxima nacional de julio de 47 grados centígrados (117 Fahrenheit) en la ciudad norteña de Pinhao.
La agencia meteorológica británica Met Office emitió su primera “advertencia roja” de calor extremo para el lunes y el martes, cuando se prevé que las temperaturas en el sur de Inglaterra alcancen los 37 Celsius (98,6 Fahrenheit).
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