Las mujeres de Michigan se enfrentan a una incertidumbre sin precedentes, ya que la batalla sobre la prohibición del aborto en el estado, anterior a Roe, continúa en los tribunales.
El lunes, un juez dio el último paso en la saga y emitió una orden de restricción que impide a cualquier fiscal del estado aplicar la prohibición. La decisión llegó en respuesta a una sentencia de un tribunal de apelación que declaró por separado que la ley era inconstitucional y emitió una orden de restricción, y luego determinó que la orden de restricción sólo se aplicaba a la oficina del fiscal general.
Las idas y venidas en el sistema judicial sobre el tema son significativas dado el control demócrata de la mansión del gobernador y de la oficina del fiscal general, mientras que los republicanos, que están tratando de aprobar tales prohibiciones del aborto en todo el país, controlan la legislatura estatal.
Por lo tanto, hay pocas probabilidades de que se produzcan cambios en la ley del aborto de Michigan a través de los canales normales por el momento. El destino del derecho al aborto para millones de mujeres sigue siendo una cuestión sin resolver: Si se permite que la prohibición entre en vigor, prácticamente impediría todos los abortos en el estado, excepto en los casos en que la vida de la madre estuviera en peligro.
Esa incertidumbre está causando problemas no sólo a los pacientes sino a los propios proveedores de abortos, que dicen que la aplicación de la ley sólo va a empeorar la escasez de médicos en el estado.
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El aborto está generalmente apoyado en Michigan. A mayoría de los adultos dicen que el procedimiento debería ser legal en todos o en la mayoría de los casos, mientras que alrededor del 42% dice que debería estar algo o completamente prohibido.
Algunos fiscales del estado han intentado aliviar parte de la reciente incertidumbre, escribiendo en una declaración conjunta el lunes que no utilizarían los recursos de sus oficinas para hacer cumplir la ley de 1931 “en el ínterin” mientras continúe la batalla legal sobre la prohibición.
Pero los abogados republicanos del estado prometen seguir adelante con la aplicación de la ley si se levanta la orden de restricción.
“Si se presenta un informe a esta oficina, lo revisaremos como hacemos con cualquier otro informe de posible comportamiento criminal”, dijo el fiscal del condado de Kent, Christopher Becker. “Tomaremos la decisión de acusar, o no acusar, basándonos en los hechos presentados en el informe y en la ley aplicable de Michigan”.
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